en el cacharro presente del pasado.
Ese depósito que no se recuerda
dónde dejamos los recuerdos.
Ya no recuerdo
si soy el de la derecha o el de la izquierda.
No sé si he crecido o he encogido
Si me he alargado o me he acortadoNo sabemos muy bien lo que nos va pasando
Sólo sabemos que somos una sucesión de puntos
que van pasando,
que se van difuminando,
que se van evaporando.
¿Ese soy yo?
No, ese es otro.
¿Quíen?
No se sabe...
Ta vez ese otro eres tú.
Tu eres el otro.
Y aquel otro somos todos.
No se sabe...
¿Y quien soy yo?
Quizás alguíen
que ya no está en la foto...
Nunca sabremos que vemos
cuándo nos miramos en una foto.
Al menos que no tomes aguja e hilo
y empieces a hilvanar
todos los sucesivos puntos
por dónde has ido pasando
y que ya se han olvidado...
(Somos un olvido.
Un recado perdido
a mitad de camino
¿Quien nos sacó la foto?
¿Quíen sería?
No recuerdo.
Hace ya mucho tiempo ya,
mucho...
Era cuándo ibamos
...¿hacia dónde?
Se me ha olvidado.
Somos un olvido.
Un recado perdido
a mitad de camino)
No, no puede ser.
Somos personajes
que nos hemos olvidado
del papel.
Y en la noesis ontológica
del tiempo congelado
...¡es terrible!...
porque todo ésto queda atrapado,
fijo,
estampado,
testigo de cargo fulminado
en nosotros mismos
por alguíen que ya no esta allí,
que ha desaparecido,
y desde otro lado trata de recuperar
inútilmente lo que ya no existe...
Frente a un espejo que no refleja tú imagen.
Frente a alguíen que ya no somos nosotros.
Y quedamos sin identidad
por la maldita foto.
La foto nos roba lo que somos,
y nos dice:
'Mira: ya tú no estas dónde te ves,
y no te ves dónde ahora estás
...¡es terrible!...
Y en la noesis ontológica
del tiempo congelado
está todo ésto atrapado,
fijo,
estampado,
como si nos amenazara algo extraño,
como si se columpiara hacia nosotros
una caravana que nos exigiése
no ser lo que habíamos pensado.
Corro al cacharro presente del pasado
y le devuelvo la foto que le había tomado...
Que se quede alli !
Con todas las otras.
Entre ellas creo que son felices
porque no tienen que confrontar
a la Esfinge del protagonista...
La Noesis es la 'fulana' que ejercita la razón,
la aprehesion de las 'formas universales'.
Y para mi la 'noesis ontológica'
es la razón del ser de...lo que sea,
en éste caso la foto de marras.
