Al Dr. Vila, capitan
del equipo blanco
Estamos a punto de saltar al terreno de juego
en un escenario de operaciones
cuyo estadio se llama Qirófano.
Aún en los vestuarios,
compases de espera regurgitan
eclipses y estrellas.
Aún en los vestuarios,
compases de espera regurgitan
eclipses y estrellas.
Once, entre hombres y mujeres
de uniformes blancos,
y cuyo árbitro será tan sólo
la pericia y la maestría
con la que todos ellos y ellas
ejecutan el supremo juego
del Ser y Tiempo (Sein und Zeit)
para que el primero triunfe,
por una gran goleada, sobre el segundo
para que el primero triunfe,
por una gran goleada, sobre el segundo
y asi dejar en offside la canallesca frase
de don Pedro Calderón de la Barca
de que el mayor pecado del hombre es haber nacido.
No obstante mi total confianza en éste equipo
que viste de blanco y que saltará al terreno de juego
para ganar y aplastar al rival...
creo que van a tener
creo que van a tener
que meterme en el Qirófano
de la misma manera que sacaron
a nuestro admirado Assange
a nuestro admirado Assange
de la embajada de Ecuador en Londres
PD 1
Hoy me avisaron del día y la hora a la que comenzará el encuentro. Es curioso la fuerza condicionante que posee la determinación en el tiempo de cualquier cosa que a va tener lugar: es como si en éste instante ese algo que va a pasar, pasara; como si dejara de volar sin ubicación y cayera a tierra en unas especificas coordenadas y empezara a tomar vida.
Futuro concretado en presente.
Todo es como una especie de incertidumbre (el principio de incertidumbre del quantum) hasta que (en éste caso) de pronto, nos llegan la fecha y la hora y se materializa aúnque aún no haya ocurrido.
Es curioso...
¿Tendrá el binomio vida-muerte la misma ecuación? ¿Si supiésemos el día y la hora de nuestro omega...también comenzaría éste a tomar vida desde el momento que ya lo podemos situar en el espacio-tiempo?
(¡Suerte que no lo sabemos!)
¿Terminaría asi ese futuro concretado en el presente
aúnque aún no haya pasado?
Divagaciones metafísicas, quizás, pero buceadoras
en el Mysterium tremendum et fascinans en el que andamos siempre envueltos.
Rollo aparte:
ya conocemos el día y la hora:
los ejes coordenados que determinan
un punto sobre el plano existencial.
Ya no nos podemos escapar.
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PD 2
Viernes.
Seis de la mañana.
Otro día y hora.
La noche oscura.
El silencio inundando la casa.
Los sueños cabalgan.
El recuerdo monta el córcel
que le lleva a las playas
donde, el mar, a lo lejos,
--ajeno a nosotros--
elejías declama.
Miro por el ventanal
y ya parece que rompe el alba.
Ay, el alba!...esa luz
que sin permiso
se cuela en nuestra alma
e inunda de infancias:
el dolce tempo della prima etade.
En mis remembranzas,
al alba,
siempre llega Moguer
--el de antes,
el blanco,
el de naranjas--,
vestido de gala;
mi primer viaje,
de la mano de mi madre,
primeros pasos de atalayas;
y todo al comenzar el día,
con la primera luz que avanza.
De la fábula al logos descubridor
(tu niñez ya fábula de fuentes),
mis tres carabelas,
alli crecieron mis velas;
desde entónces navego
por el mundo,
al alba,
con la primera luz
del día,
de la infancia.
Otro día y hora.
La noche oscura.
El silencio inundando la casa...
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PD 3
El día y la hora
siempre llegan a un mañana.
--a la velocidad de la luz,
a lavelocidad del fantasma--
Mañana sin maña,
a pura piedra,
desnudo de ventanas,
con la única salida
a la puerta del hoy
que siempre aguarda
en un presente
que en el quantum del tiempo
se abalanza y dilata...
y todo se detiene,
expande,
ensancha,
roca sísifica
que al llegar a lo alto,
baja;
una y otra vez
hasta que el infinito
alcanza,
hasta que estalla
la estrella más cercana,
hasta que la razón
se rinde
sin entender
lo que pasa...
Alli nos encontraremos todos
el día y la hora
que tenemos establecidos
por un piloto automático
que nos lleva,
mientras dormimos,
en nuestras playas...
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PD 4
El día y la hora.
Espera,
La ciencia de aguardar
Pa-ciencia
Seguidores del camino
que ya no se bifurca
y que hay que andar,
que no se inunda
de maleza a apartar,
que sólo sigue el curso
de ausencias
que después se haran
realidad:
caballitos de colores
que cabalgan en el mar
y que se ciñen a un destino
que hay que descifrar
¿Dónde está el reloj
que mide el tiempo
del movimiento
de la espera,
esa conciencia del universo
que en todos sitios está
y para la que mil millones
de años son ese día y hora
que pasando nunca
acaban de pasar?
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PD 5
Desde el día y la hora
podemos llegar al hoy.
(O en el camino
nos podemos extraviar
y nunca llegar)
Hoy es hoy
Aqui y ahora
Hic et nunc
El hoy es el punto mas bajo
adónde la fuerza de gravedad
arrastra a todos los cuerpos
que en ella van
Es el perpetuum mobile
de lo estático al que arrastra
el Universo desde lo ancestral.
Hoy --dicen-- es 30 de Abril,
cinco de la mañana,
cuando la oscuridad
aún se resiste
a que la empuje el alba
con su luz primordial
A punto de saltar
al terreno de juego...
Todo es un juego,
divertido,
carnavalesco,
trágico,
mortal,
deformante,
coherente,
maravilloso,
único,
--no conocemos otro--
absurdo,
pero real....
donde la muerte y la vida
derimen su duelo con testigos
a los que no se pueden comprar,
vamos...cosas de humanos,
nada más...
¡A jugar...!
