Cuando Gibbon estaba sentado en las ruinas del Foro romano y decidió escribir su Decadencia y Caída del Imperio Romano, tal vez estaba pensando en esa frase de Petrarca, en ese dulce tiempo de la primera edad cuándo aún todo está por ver, por ensayar, y el mundo, inexplorado, se nos abre como asunción primaveral.
Y al darse cuenta, en quellos fósiles ya, del flujo y del curso del esplendor --de crimen y cultura-- de aquella civilización que ahora yacía en ruinas a sus pies, en el trance de imaginar y contrastar el dolce tempo de aquel imperio desmoronado ya por el dios Cronos que se come a sus hijos y lo deja todo en la diseminada y muda arqueología que queda de aquella prima etade, tal vez, allí, sintió el arcano llamado de trazar aquella história que había ido transcurriendo desde el dolce tempo della prima etade hasta aquel final de silencios y huellas petreas que ahora contemplaba.
Tal vez todos, de adultos, y cruzado el río ya, pasamos largos ratos sentados en las ruinas de los tantísimos Foros romanos que existen, no solamente en la historia, sino en nuestras propias vidas, contemplando, impotentemente, un transcurrir del tiempo que siempre se nos antoja que camina desde ese dolce tempo...hacia el presente donde las sendas de lo caido --y decadente-- ya no conjugan el dolce del preterito pluscuamperfecto de la prima etade
En todas las culturas humanas existe como una tendencia anímica y subterranea a creer que el pasado, la primera edad --la filogenetica y la ontogenetica-- siempre fue mejor.
Y como para todo pesimista cultural, como yo, las 'malas noticias' son siempre 'buenas noticias (y no es solamente porque comprobamos que estamos en lo cierto, sino porque cuanto antes hagamos "borrón y cuenta nueva", mejor, porque, como vemos, con esta "cuenta" ya no vamos a ningun lado), lo que se hace, --o se debe de hacer-- es buscar la corroboracion historica tal pesimismo cultural, de la concepcion que va del dolce petrarcaniano a lo acido del presente (A pesar de que Nietszche --tratando de desenmascararse a sí mismo-- decía que un pesimiesta es un optimista resentido.)
Y yendonos hacia atras ya encontramos en la Iliada de Homero una descipcion del Ayax que cogia con una sola mano una piedra que el joven mas fornido de nuestra generacion no habria lanzado con ambas manos.
Setecientos años antes de Cristo, el poeta Hesíodo ya interpetaba el cosmo como un proceso de decadencia, de desmoronamiento generacional. Comenzaba en lo dolce, en una edad de oro donde los hombres vivian en armonia y paz, y seguian una edad de plata, una de bronce y una de hierro donde los hombres debian vivir del sudor de sufrente y de sufrir su destino (Yo lo interpreto acarreando ya la conciencia de su propia muerte, despues de la expulsion del Eden)
Pero tambien podria ser esta edad de hierro, porque todo en las culturas humanas esta conectado, el equivalente al Kali Yuga de la religion hindu y vedica, que es la ultima y la peor de las epocas humanas, al borde ya de esas ruinas del Foro romana en las se sento Gibbon, cuando los gangsters, los lobos con piel de cordero, gobiernan el mundo.
Mitos semejantes aprecen en la China confuciana, aztecasa, lapones, zoroastrianos, nativos americanos, tribus irlandesas, lo mismo que en el libro del Genesis.
¿Por qué y cómo la noción de decadencia, la estipulación de que el dolce tempo...siempre camina hacia el desmoronamiento, hacia las ruinas de los Foros romanos del presente, aparece con tanta freciencia y esta tan implictamente ligada a todas las culturas?
La memoria --¿subconsciente colectivo?-- humana del pasado suele evocar un mundo con poderes y equilibrios ancestrales con la naturaleza que hoy estan perdidos. Estas cualidades perdidas de la evolucion social del hombre sobre la Tierra parecen que son circulos concentricos en lo que Shakespeare resumiria en las Siete Edades del Hombre.
La aportacion de los griegos al respecto es sumamente importante porque condujeron las concecuencias de esta conciencia empirica elemental (de la entropia) del transcurrir del tiempo (en la especie humana) a un aragamazon metodologico que racionalizaba la hermeneutica de una concatenacion de acontecimientos en la existencia, que, por primera vez en la historia occidental, tomaba la forma esencial de una filosofia.
Y este fue el genio de los amos de esclavos griegos, que, por primera vez --en la historia conocida--, independizada una clase social del trabajo de su propia manuntencion y sustento, la elite de sus miembros se pudo dedicar a la genuina reflexion y analisis de ls aituacion del hombre, ante si mismo y ante el mundo circundante.
Para la pleyade de pensadores griegos, el tiempo era, fundamentalmente, cambio. Estamos en los origenes de la dialectica. Todo lo que es, ahora, y, aparetemente en estado estatico, esta en movimiento hacia un fin, hacia dejar lo que es ahora. Heráclito postuló que todo el cosmo esta bajo una implacable y sola ley: Cambio. Por lo tanto lo que podamos aprehender y ver en este instante es pasajero. Todo fluye nada reposa (Aunque Parmenides le llevara la contra)
La palabra que los griegos usaban para el tiempo era Khronos,
era la misma del dios que devoraba a sus propios hijos.
La vision que permeaba la cultura griega y romana era l percepcion de la fugacidad de la vida humana. La vida era demasiado breve como para postergar la gratificacion. Aparte de su sentido pragmatico, conllevaba el entendimiento conceptual de que nel dolce tempo conducia inexorable a su antitesis.
La hermeneutica grecoromana del transcurrir del tiempo llevaba la conviccion de que los acontecimientos no tenian lugar por azar, sino en consonancia con un ciclo repetitivo (el eterno retorno nietzschiano) Los griegos llamaban a este ciclo anakuklosis, revolucion. La serpiente termina mordindose la cola y el alfa acaba tragado por el omega, con sus viceversas, en un continuum de un circuito sin fin donde el cambio es la fuerza motriz de toda esta espiral
La version feudal de este ciclo era la rueda de la Fortuna, "el juego de la oca", decian los señores de los castillos: "tiro porque me toca". Y siempre le toccaba a ellos. La ruefa de la fortuna siempre hiraba en su favor, un azar que siempre favorecia a los mismos.
Tenemos que tener en cuenta que seguimos en la esclavitud, y cada cultura, cada clase social en el poder, adaptaba la realidad a sus intereses para que todo cobtinuara beneficiando sus estabecidos intereses.
El truco en la epoca feudal estaba muy bien montado, porque lo unico que se podia hacer frente a la incertidumbre de la rueda de marras era ser bueno, la virtud, cree en Dios Todopoderoso,
que es el unico que nos odia ayudar en nuestros infortunios. La virtud era la fuerza interior necesaria para superarr los "dardos y reverses de la caprichosa Fortuna". Y trabajar tres dias a la semana para el señor delcastillo era el mejor medio para ser virtuoso.
Pero el robo de las riquezas de America pronto iria a hilvanar,
junto con los comerciantes y rateros de Bolonia, la caida del idilico status de los señores del castillo y sus cohertes de reyezuelos, principes y clero. Los burguese ya estaban en feto en la bolsa marsupial de la historia.
El dinero empezo a correr. Y sus poseedores comenzaron a apretar a los cerebros que tenian para que se pusieran a trabajar en mejores cacharros con los que explotar mejor.
Y los pensadores, los filosofos, los misticos, todo se pusieron a colaborar con los nuevos tiempos que desplazaron a la "virtud" y la rreemplazaron por la eficiencia y competencia en los mercados, con nuevas maquinas, con nuevas tecnicas con las que extraer mas de los esclavos.
El pesimismo cultural se vio dañado.
Porque el progreso encamdila con sus nuevos jugetes que gustan tanto. Pero habia que producir cada vez mas y mas, habia que trabajar cada vez mas y mas en larguisimas jornadas de trabajo. Las primeras acumulacones de capital que tirarron abajo los castillos provenian de la sangre y el sudor de las gentes. Y el pesimismo se convirtio en lucha.
Pero habia que compaginar las nuevas leyes surgidas --de la maquina y el comercio-- con las leyes de Dios. Grocio, Locke, Pufendorf, Vico, las mentes que nacian dijeron que las leyes naturales que regian la conducta humana tambien eran leyes divinas, y la anakuklosis griega se adopto a las nuevas circunstancias.
Cada ciclo historico comenzaba con una edad arcaica, reyes sacerdotes y mitos primitivos, seguia una epoca epica de heroes y luchas que llevaba al imperio universal, el cual despues se demembraba y entraba en barbarie, y vuelta a la anakuklosis.
Un pesimismo ciclico fatalista de hojalata para acertr el numero de la loteria despues de verlo salir.
Habia salido una luz que prometia mejoras. El Iluminismo, el que le dio brillo a la mente de Vico en su hermeneutica de ver a la sociedad humana formando parte de un orden benevolo y racional y natural. Se iba por buen camino. Habia que hacer trabajar a los otros para producir ese camino, pero la meta valia la pena.
De pronto aparece Hobbes que estaba oculto en las sombras que producia este Iluminismo diciendo que el institinto natural del hombre connducia a la guerra. Queria aguar la fiesta, peron los apologos prevalecieron. Porque medio siglo despues de él, Hutcheson apreto el interruptor de esa luz, se ilumino el cuarto, y dijo que la sociedad humana nacia de la sociabilidad del hombre que huye de la soledad, que quiere la compañia de los otros. Hume y Adam Smith quedaron encantados con esta descripcion de la solidaridad humana.
En el ocio de unos pocos se inician las artes. Y Hume, que estaba al quite, dijo: "Cuanto mas avanzadas sean estas refinadas artes, mas sociables se tornan los hombres". El arte de trabajar, marcado con hierro al rojo vivo, veinte horas diarias tambieb era un arte.
Comienza a elevarse la teoria secular europea de "progreso", de "civilizacion", a pesar de los cadaveres en los campos de batalla.
Existia tambien llegaba la concienci de que el mejoramiento que llegaba tenia que cimentarse en la destruccion del mundo anterior. Gibbon adopto este escapulario transformador en la mas famosa obra del Iluminismo, La Decadencia y Caida del Imperio Romano. Gibbon postulaba, sagazmente, que "en vez de prreguntarnos por que fue destruido el Imperio Romano, deberia asombrarnos que haya subsistido tanto tiempo"
Era el Iluminismo.
Nace la perspectiva de ver el paisaje desde atalayas.
Roussaeau que observaba todo esto desde el quantum de su inteligente cerebro unido a un ADN de novivio Zen, que oteó y olió venir el temporal como ningun otro, respondió desde otro lado: "Dios Todopoderoso, liberanos del Iluminismo y devuelvenos la ignorancia, la inocencia y la pobreza".
Rousseau, realmente, fue el primer critico del capitalismo (bueno, en verdad fue Cristo: "Es mas dificil que un rico suba al reino de los cielos...") y el profeta del fracaso de la sociedad civil. "El hombre nace libre y por doquier esta esclavizado". "Todo progreso subsiguiente lo unico que ha conseguido son pasos aparentes hacia el mejoramiento del individuo, pero pasos reales hacia la ruina de las especie" . Rousseau no se dejo encandilar por los escaparates. Estaba sembrada la semilla. La Revolucion francesa fue su salon.
Pero el fuego fatuo que Iluminaban los cielos siguio cabalgando sus dias de grandeza. Byron, Shelley, Mazini...cayeron ppstrado ante los nuevos idolos: la libertad personal era el fin del progreso humano, afirmaba el liberalismo romantico y la en pañales revolucion democratica burguesa.
Habia empezado el carnaval moderno.
Dejemos este nuevo decorado para el siguiente 'post'.
