Vivíamos en la Unión de Satrapas Americanos cuándo en uno de mis cumpleaños recibo esta felicitación del viejo y querido amigo Raimón, ya en la otra orilla de lo que Freud llamaba el Principio de Nirvana.
La A-206 es lo que me ha hecho recordar y ubicarme en el tiempo y en el espacio. Porque la citada A-206 era el número del cuarto dónde estabamos despues de haber llegado de Big-Island en Hawái, dónde permanecimos desde principios del 91 hasta el finales del 96 -siglo pasado- tratando de currelar hasta que al final tuvimos que regresar a lo que allí llamaban main land, la tierra principal, USA.
Porque claro, Hawái no tiene que ver nada con los Estados Unidos (lo mismo que Puerto Rico, Guam, Samoa, etc. territorios que han incorporando a la main land; salvo que en el caso de Hawái, para asegurar la presa, lo convirtieron en el estado númer 50: Roma locuta, causa finita.
Ni que decir tiene que el pueblo hawaiano ni acepta ni aceptará nunca ser americanos. Pero no nos desviemos con biografías personales que no vienen a cuento ni a leyenda.
La cuestión fue que con el sindicato, Operating Engineers Local 12 (¡Dios lo tenga en su gloria! porque sin ellos me hubiese tenido que ir a lavar platos -como lo hice- al Big-Boy), apenas trabajé de topógrafo. Asi que en un mitin familiar se llegó a la conclusión de que tenía que regresar a la main land a currelar. Y en Nevada el Local 12 funcionaba con posibilidades de trabajar allí.
Y alli, con el corazón roto, nos fuímos. Cuándo llegamos a Las Vegas procedente de Kailua-Kona, la ciudad donde residíamos en Big-Island, estuve a punto de caer redondo al suelo...el salto mortal fue difícil de asimilar.
Y aqui llega para quedarse la A-206, el cubí-culo del hotel mastodóntico (con miles de cuartos) dónde me alojé.
1996. Hacía 56 años que había nacido en la Plaza San Pedro de Huelva. Y ahora estaba en la Monstruosa Las Vegas procedente de estas nostálgias crecidas y regadas en las diasporas de nuestros caminos...
...y, de pronto, Raimón, cuándo las paredes de la A-206 se nos caían encima -como muy bien dices-, llega tú redentora felicitación cumpleañera y, con ella en la mano, saliendo desesperadamente de los escombros de aquellas malditas paredes, abro tu misiva...iluminando y transformando aquella oscura celda de la A-206 adónde llegabamos todos los días con el espíritu roto.
Y aquí pongo tú carta, querido viejo (los viejos nos queremos mucho como mimesis compartida de lo que nos espera), como ejemplo por antonomasia de lo que debe ser un verdadero y auténtico Happy Birthday que nos libere de los escombros de las consuetudinarias tonterías y tópicos comerciales de las felicitaciones (y pésames) con los que -sin pensar- nos embadurnamos en ciertas efemérides desde nuestro nacimiento hasta la muerte porque, simplemente, detrás de todo ello siempre hay una industria dispuesta a no perder su oportunidad de vendernos sus frases y dichos que felices nos haran...
Pincha en la carta para agrandarla
y leerla con claridad
..........................Post Data A
Sui generis, provocadora y catapultesca
forma de dedicarnos su libro
Los Manuscrito de Pompeya
Era un pipapero
El humo le entraba y le salia
por los mismos agujeros.
"Te estas atascando las cañerias
que sirven de respiraderos"
--Le decíamos--
Le daba igual
Como si oyera llover.
Y llovía mucho
Y no llevaba paraguas
para protegerlo.
Decía cachondonamente al respecto
de la hipocondria del to be healthy:
"Los americanos son los unicos
que mueren en perfecto
estado de salud"
...Le daba igual
Como si oyera llover.
Y llovía mucho.
Y no llevaba paraguas
para protegerlo...
Era muy irrespetuoso con el corpus;
con la llamada salud.
Con la cabeza no.
La cabeza la cuidaba
y aqui no llovía:
un impermeable herramientizado
la protegía y lograba escaparse
por los mismos agujeros
por donde el humo entraba y salia...
De esa cabeza salió
la dedicatoria mencionada:
Caligráficamente -es curioso- tú letra no tiene mucho que ver con tú visible personalidad, con la aplacada idiosincracia ontológica del tempo funcional de tu ser, estar, pensar y expresar...es más: hay un saltimbanquismo en tu letra que es totalmente opuesto al metrónomo ritmico y acompasado de tu verbo. Nadie podría imaginar al conocerte que pudieras tener el tren descarrilado de tu caligrafia...¿A ver si vas a ser un saltimbanqui camuflado y me has engañado?...Viajeros al tren: todos vamos en trenes parecidos y disimulados...(Viejo, ya ves, sigo como siempre: jodiendo la marrana con esta analítica neurótica que me persigue. Por eso, para que no me descubran, aporreo teclas y evito escribir)
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Vamos...esto no es ya tan sólo una dedicatoria para Épater les bourgeois...esto es para, incluso, Épater al Homo antecessor de Atapuerca. Es que siempre supistes, puñetero, desoficializar la realidad Epaterizándosela a la audiencia.
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Post Data B
Bueno, viejo, aqui acabamos esta parida que se ha ido alargando demasiado porque había mucho en el tintero que no se había totalmente derramado.
Estés dónde estés, en el Principio de Nirvana, en la Nada nadera o en ese Mysterium Tremendum et Fascinans, MTF, con el que llegamos a la vida, y que nunca, como nuestra sombra, se ira de nuestro lado, ahi te mando estas líneas porque, tengo que confesarte: creo en el Entrelazamiento Cuántico, EC, que viene a ser como una "Fantasmagórica Acción a Distancia", FAD, que ocurre cuándo dos partículas estan conectadas al punto de que lo que sucede con una inmediatamente afecta a la otra...fíjate bien que, incluso, no es preciso que esten 'vivas' para entrelazarse, para conectarse, con ser sólo partículas es bastante; otra vez el MTF en su profunda y arcana función. El entero Universo debe de estar cuajado d estas esotéricas conexiones. ¿Que te parece, cara de huevo?
Y atornillando aún más el asunto te diré que este EC ya ha sido reproducido en laboratorios, aúnque aún no se comprende cómo se produce. Y que bien que no se comprenda cómo se produce, asi le dejamos la puerta abierta a lo mágico, a lo hermético, para que este gusanito vestido y engreído se empiece a dar cuenta de su petulante y agresiva insignificancia.
FAD,
Manué.
Portate bien y cuídate.
