El que cerró poniendo la piedra
se quedó dentro.
Para él tampoco quedará nada
Y seguimos queriendo ser como él.
¿Cómo puede ser?
¿A éste punto ha llegado la ceguera, el engaño?
¿Nos engañan o nos engañamos?
¿Cómo puede ser?
Habrá que preguntárselo al sabio de la tribu
Pero el sabio de la tribu ya se fue.
O fueron asesinados o exilados
O tal vez en la cárcel cambiaron de parecer
O tal vez lo embaucaron para que nos dijera
que podíamos poner la piedra de otra manera
No sé.
No queda nadie a quien preguntarle
cómo puede ser
O quizás también el sabio se quedó dentro,
entabicado, al cerrar con la piedra el agujero
por dónde aun podíamos ver
No sé
El hombre es una criatura extraña,
muy extraña, difícil de aprehender...
Hacer un circulo a su alrededor
para después no poder salir de él
Últimamente he escuchado a José Luis Sampedro
y Julio Anguita, dos sabios locales a mi entender,
y aunque sus palabras eran y son sabias siempre se detenían en el umbral de la casa a derribar y de la luz a encender...
Y recordamos las palabras de Wilhelm Reich en el capítulo 'The Trap' de su libro "El Asesinato de Cristo":
"Everything seems to point to one single fact: There is something basically and crucially wrong in the whole setup of man's procedure of learning to know himself (....) It is the basic evasion or the essential which is the problem of man.
Fue ésta evasión de lo esencial lo que encontramos en Sampedro y en Anguita,
por ejemplo:
el no decirle a las gentes que
el capitalismo es antidemocrático par excellence.
A ésto le llamamos nosotros
evadir lo esencial.
