Al principio había que ir a por ellos al Africa o a otros lugares lejanos y, aúnque el papa Pablo III promulgó, el 2 de junio de 1537, la bula -bulo- del Sublimis Deus dandole alma a todos los seres humanos, no por ello disminuyó el citado tráfico, al contrario, aumentó. El alma siempre aumenta en estos tráficos.
Pero era una lata salir en busca de escalvos al exterior. Lo mejor sería que ellos vinieran por su voluntad, necesidad y deseos de superación. Oportunidades lo llaman.
Y por barco o por tierra comenzaron a llegar.
Ya no hacían falta grandes expediciones ni inversiones ni cadenas ni lazos, tan sólo atraerlos al panal de miel de la mano de obra barata dónde estaban las riquezas que habían saqueado en sus propios países para que ellos, aúnque fueran sólo un poquito, pudiesen de ellas participar y multiplicarlas aún más.
Y, ora pro nobis, todo iba viento en popa para los navegantes y cruzados del dineral: dejad, dejad que se muevan y salgan de sus propios sitios antes de que creen alli malestar social imposible de controlar. Sublimis Deus, Dios es Sublime en su misericordia y bondad.
Pero también se producían otros transfugas como consecuencia de las guerras imperialistas que mataban y y saqueban para grandeza de ese mismo Dios Sublime bajo el que se debía conquistar. Y todos estos que huían, naturalmente, tenían que dirigirse, ironías del macabro destino, y llamar a las puertas de los mismos que destruían sus países y su dignidad. Todo un espectáculo colonial de grandes proporciones e implicaciones en el circuíto del çapital que se acepta con la santa psicopatología de la normalidad. Perpetuum Mobile de esclavos y refugiados listos para ser ordeñados y ser USAdos en otros menesteres que tanto necesitan los Amos de Escalvos en sus becerros de oro a adorar.
Rfugiados de las guerras imperialistas que tratan de escapar hacia los propios paises causantes de sus ruinas, muertes y mutilaciones
que quieren dejar atrás.
Hoy, los estados esclavistas çapitalista (a los que los propios esclavos llaman "democracias") al respecto, y a muchísimos respectos más, como tan bien ha explicado Theodore Kaczynski (Ted para los compañeros de cárcel) tienen una poderosa arma de clase: la Tecnología, la que ha cambiado las reglas del juego, en favor de la Sublimis Deus, en favor de Dios: hoy el Mercado de Esclavos se cotiza en la Bolsa. Asi que se pasó de esto:
A esto otro, que cubre y luce más:
Comenzamos cogiendo al lazo a seres humanos y, encadenandolos, los convertimos en esclavos metiendolos hacinados en barcos y trasladandolos a los mercados, y terminamos en pizarras electrónias
con números y monenclaturas para esconder los crimenes y barbaridades en lo que todo está fundamentado:'be happy don't worry', la esclavización del hombre por el hombre siempre ha pasado.
Y asi tratamos de pasar por alto lo que en el alma llevamos clavado en un free world de derechos humanos dónde todos, cada día, estamos mas putrefactos y jorobados.
