" México Lindo y Querido
si muero lejos de ti,
que digan que estoy dormido
y que no me traigan aquí "
si muero lejos de ti,
que digan que estoy dormido
y que no me traigan aquí "
El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Raúl Plascencia, aseguró ante senadores que de 2005 a la fecha hay casi 25 mil personas desaparecidas en México. “Se tiene registro en la Comisión Nacional de Derechos Humanos de 24 mil 800 personas cuyo paradero se desconoce, esto es, no se encuentran localizables, pero por otra parte, existe el dato también de dos mil 610 casos en los cuales, 612 de ellos existe la presunción de intervención de agentes del estado mexicano en la desaparición de estas personas”, comentó Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
La película mexicana "El Infierno", que anteriormente hemos comentado, encaja aqui como anillo al dedo en ésta desaparecida "democracia" del horror de los desaparecidos que la nefasta burguesia imperial y local cubre, financia y explota hasta los huesos mientras que el pueblo azteca soporta y lucha con heroico esfuerzo y arrojo...Y, al mismo tiempo, esa criminal burguesia se rasga las vestiduras por la falta de libertad en Venezuela y arremete terrorísticamente contra el gobierno bolivariano de Venezuela...
...Y uno se tira de los pelos --aúnque le quedan pocos-- en rabia contenida y no sabe ya ni que decir, porque todo está dicho, ni que pensar, porque todo está pensado, y como no tiene dinero para comprar un ejército se dedica a escribir inútilmente en ésta bitácora ante la impotencia, frustación y crónico bilis que produce ésta 'ad nauseam' denunciada camada de sátrapas, gangsters y bandidos cuyos cacareados "derechos humanos" estan ya trasformados en jorobarnos a todos, pero con un descaro y con una desfachatez que empiezan a romper el más sólido y calmo plasma biológico.
Desde aquí nuestra más sentida solidaridad con el pueblo de Villa, Zapata, Carranza...con el único pueblo del mundo que tuvo el honor de ajusticiar a un emperador imperial, Maximiliano I de México.
La película mexicana "El Infierno", que anteriormente hemos comentado, encaja aqui como anillo al dedo en ésta desaparecida "democracia" del horror de los desaparecidos que la nefasta burguesia imperial y local cubre, financia y explota hasta los huesos mientras que el pueblo azteca soporta y lucha con heroico esfuerzo y arrojo...Y, al mismo tiempo, esa criminal burguesia se rasga las vestiduras por la falta de libertad en Venezuela y arremete terrorísticamente contra el gobierno bolivariano de Venezuela...
...Y uno se tira de los pelos --aúnque le quedan pocos-- en rabia contenida y no sabe ya ni que decir, porque todo está dicho, ni que pensar, porque todo está pensado, y como no tiene dinero para comprar un ejército se dedica a escribir inútilmente en ésta bitácora ante la impotencia, frustación y crónico bilis que produce ésta 'ad nauseam' denunciada camada de sátrapas, gangsters y bandidos cuyos cacareados "derechos humanos" estan ya trasformados en jorobarnos a todos, pero con un descaro y con una desfachatez que empiezan a romper el más sólido y calmo plasma biológico.
Desde aquí nuestra más sentida solidaridad con el pueblo de Villa, Zapata, Carranza...con el único pueblo del mundo que tuvo el honor de ajusticiar a un emperador imperial, Maximiliano I de México.
Ahora hay otro Maximiliano, pero éste no es de 'Austria-Hungria', sino del American Dream del Norte, cuyas zarpas, intereses y lacayos "in situ" se tienen que enfrentar con otras estrategias y herramientas precisas para detener éste Infierno cuyas llamas se extienden incontenidas.
Mientras tanto, la sacrosanta televisión,
para comfort, fé, esperanza y caridad,
sigue dando "La Rosa de Guadalupe"
(¿la verá Carlos Slim?)
para que todos seamos
buenos y rectifiquemos
en la confianza de que la Morenita
solucionará nuestros problemas,
y en caso de que no sean resueltos
ya vendrá algún día el Papa Francisco
para que invoquemos y roguemos con él
por todos los Desaparecidos
que no aún no han aparecido,
dado que don Jorge Mario Bergoglio,
por su experiencia con la antigua
Junta Militar argentina,
es todo un experto en éste tema.
