Quevedo
Anoche soñe lo que le oí decir a Nines Maestro.
Con Sus palabras,
sus ideas;
en la verdad, su alma y corazón,
y en su incólume limpieza ética,
la sensiblidad enorme de su convicción,
y en las alas de su perínclito análisis,
clavada su axiomática exposición
de los hechos que padecemos
con la exácta penetración de la realidad,
articulada con lógica de 'Maestro',
subiendo, uno a uno,
los peldaños de la escalera
que nos lleva a la objetividad
para hacernos ver, nítidiamente,
en qué clase de sociedad vivimos,
para hacernos ver, nítidamente,
con qué clase de máscaras,
enajenaciones y cobardías,
nos cubrimos para,
agachándo la cabeza,
no querer ver y sentir el yugo
que tenemos que soportar para seguir vivos
sobre aquello que decía Engels
de "la inconsciencia de los interesados":
la inconsciencia que tenemos
de nuestro propios intereses, claro.
Se ha preguntado muchas veces
pero lo vamos a volver a preguntar:
¿Cómo puede ser que las gentes,
el pueblo, la mayoría,
vaya cotra sus propios intereses?
¿Cómo puede ser que "votemos"
contra nosotros mismos?
¿Cómo puede ser que vamos encadenados
por nosotros mismos?
(¿Será por eso por lo que no queremos
moveremos ni andar...
para no oír el chasquido de las cadenas
que nosotros mismos nos hemos atado
bajo el parroquial aforismo
de que "así fué siempre y así siempre será"?)
Esto sólo puede pasar de una sóla forma:
por el falso contenido "televisivo" de nuestra conciencia,
por nuestra pereza y abulia intelectual
en descubrir y rechazar
todas las patrañas y distorsiones
con las que nos han llenado nuestra existencia
hasta el colmo de la tontez global.
O dicho mas técnicamente,
cómo lo describió W. Reich:
"...Porque la estructura psíquica del hombre y la estructura ideológica política del Estado --burgués-- son funcionalmente idénticas"
¡ Nos identificamos con nuestros opresores !
¿Cúal debe ser la inconmensurable magnitud
de la sofisticadamente barbárica opresión
bajo la que vivimos para que nos identifiquemos con ella?
Es por ello que el famoso psicoanalista de principios del siglo XX, Siegfried Bernfeld, ya planteaba el problema de ésta forma:
¿Por qué la mayoría no "aniquila simplemente" a la minoría explotadora?
Su provisional respuesta era:
"Porque a la mayoría le falta la intelección de su condición de explotados o la posibilidad de una sociedad estructurada de otro modo, o les falta valor"
O porque, como respondía E. Fromm:
"...Para explotar a la mayoría, la minoría ha utilizado, por lo general, la fuerza; pero la fuerza no es suficiente. A la larga, la mayoría ha tenido que aceptar voluntariamente su propia explotación, y ésto sólo es posible si su conciencia, su mente, se ha llenado con toda clases de mentiras y ficciones".
...Anoche soñé, sobre mis campos líricos,
que Nines Maestro,
como un faro en la oscuridad de la noche,
barría todas esas sombras
de mentiras y ficciones por dónde navega
el barco humano y podíamos, así,
alcanzar el puerto deseado
para evitar el naufragio que estamos enfrentando.
...Anoche soñé que mientras tengamos
a Nines Maestro a nuestro lado,
ese faro de la esperanza que necesitamos
siempre nos estará alumbrando.
" ¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son. "
¿Será cierto lo que dijo don Calderon,
el de la Barca, que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son,
y que los sueños míos de anoche,
donde Nines Maestro era un faro en la oscuridad
fueron tan sólo "una ilusión"
porque en un mundo donde no hay justicia,
como dijo Quevedo,
siempre es peligroso tener razon...?
http://sisifocansado.blogspot.com/2012/02/donde-no-hay-justicia-es-peligroso.html