Diosas y Dioses
del Espacio Infinito,
aquí estamos,
aquí seguimos,
en la rutina diaria
del mono-vestido:
empujadores de rocas
que vuelven a caer
después de depositarlas
en sus sitios:
una y otra vez,
noche y día,
contínuo trabajo sísifico
es nuestro destino:
¿Por qué,
Diosas y Dioses
de los Espacios Infinitos?
¿Cúal es nuestro pecado,
cúal fué nuestro delito?
Nunca contestáis.
Nunca abríis los candados.
Todo lo tenéis cerrado.
Todo es silencio,
indiferencia,
en vuestros Espacios Infinitos.
Y al preguntáros quíenes somos,
adónde vamos,
de dónde venimos,
un silencio sepulcral
inúndan nuestros sentidos,
y vuestro Universo,
displicente,
distante,
frio,
nunca responde
en su Inmenso Vacío.
Y aquí estamos,
y aquí seguimos;
pero no nos resignamos:
es una rebelión metafísica,
antropológica,
a dos manos,
que se alza y ruge de impotencias
en vuestros Mutismos Infinitos.
que nos tienen condenados.
Porque, sin consultarnos,
nos hacéis llegar,
y, sin preguntarnos,
nos hacéis sacar;
y entre este alfa y omega
nunca encontramos la paz,
tenemos que esperar a la lapida funeraria
para que nos escriban en ella
ese epitáfio significativo y mortal;
porque en vida
siempre vamos recorriendo meandros
de ríos sin desembocar,
buscando un balance
que no podemos encontrar;
y para colmo nos daís una cabeza,
en contradicción con el cuerpo,
con nuestra esencialidad,
que nunca descansa,
que sólo atina a cuestionar,
que sólo escarba sin hallar,
y no hallamos cobijo
o un lugar para reposar.
Vuestro gran profeta, Cristo,
nos lo dejo dicho sin dudar:
"Las aves del cielo tienen sus nidos
y las alimañas sus guaridas,
pero el Hijo del Hombre
no tiene dónde apoyar su cabeza."
¿Por qué?
¿Es que tanto nos pesa?
¿Es que tan morbidamente nos ha crecido
que ya no podemos sostenerla?
¿Por qué,
Diosas y Dioses de los Espacios Infinitos?
¡ Responded de una vez !
¿Cual fué nuestro pecado?,
¿Cual fué nuestro delito?
En la Naturalez todo encaja en su lugar,
todo esta en armonía,
en equilibrio ancestral,
entonces:
¿por qué el hombre
es el único animal que naufraga
si es el único con inteligencia para navegar?;
¿es que adquirió esa 'inteligencia'
por Medios Fraudulentos
que se esconde a sí mísmo
para no descubrir su mal?
Me dicen el tópico, sin pensar,
que así fué, es y será,
que así somos,
que así es la Naturaleza;
que en este sentido,
es irrisoriamente inútil sublevarse
contra la desaficción
de Vuestro Cósmos
que nunca nos permite descifrar
éste Tremendum Conundrum
de la Vida y la Muerte,
resolver ésta enajenación existencial,
(estar en 'un aquarium' separados
de Todo por 'unas paredes de cristal')
dónde habéis encerrado
nuestro artificial cortex cerebral.
Pero os desafiamos a contestar,
porque estamos seguros
que en otras partes del Universo,
ésta patógena cabeza humana
(de la que Cristo habló)
ni ha existido ni existirá,
que somos tan sólo un capricho,
una anomalía de Vuestros Sueños
dónde algo se descompuso al final,
un DNA doblado,
un Azar Fatal,
un programa mal interpretado,
un canibalismo de 'frutos prohíbidos'
que nos sacó del paraíso terrenal,
alguna transgresión debió pasar
...porque lo que ocurrió,
en nuestra evolución,
es algo que nunca,
en vuestos Espacios Infinitos,
tuvo lugar,
y la eviencia es este presente
al que hemos arribado,
éste 'cul-de-sac' dónde,
al solucionar un problema,
creamos mil más:
¿es eso normal?,
¿es esto Natural?
Contestad.
Esta hiperdesarrollada cabeza humana
no surgió por evolución natural,
esta 'testa' que produce
un contínuo descontento,
una dicotonomía en nosotos mismos,
con nuestros congéneres
y con la Naturaleza,
es la que ha producido
la cultura,
las ciencias,
la filosofía,
los mitos,
la religión,
tratando de hallar una respuesta
a tal desorientación,
pero todo ha sido en vano:
nada ha podido detener
el naufragio de la civilizacion,
cada día con mas problemas,
con más destrucción.
Por eso os peguntámos:
¿Qué nos ha pasado?,
¿Por qué nos habéis castigado?.
Diosas y Dioses
de los Espacios Infinitos,
salid de vuestro Silencio,
responded,
es lo único que necesitamos;
dejad que nuestro destino sísifico
siga subiendo la roca,
no nos quejamos,
(ya estamos acostumbrados)
pero ahora,
cuando ya estamos a punto
que de ésta vida seamos eliminados,
sólo queremos saber,
conocer,
qué acontenció con el "homo sapiens"
que vosotros, un día,
arrojásteis afuera de la Naturaleza
por un delito, por un pecado,
por haber cometido una "desobediencia"
en el Jardín del Eden
...la cual aún no se nos ha explicado;
y tenemos derecho a saberlo
antes de ser, de nuevo,
a lo inórganico tirados.
Diosas y Dioses
de los Espacios Infinitos,
sabéis muy bien de que hablamos,
¡ no esconderos !,
¡ salir a contestarnos !,
¡ romped vuestro Silencio!,
responded a esta oración
que a vuestros Espíritus elevamos
...porque aunque otros se conformen,
nosotros no nos conformamos,
sufrimos la sentencia,
pero no la aceptamos,
es la única forma
de, con valentía,
cumplirla porque estamos atrapados,
pero nos rebelamos,
y en ésta Insurrección
contra Vuestros Designios
radica nuestra única opción,
nuestra protesta,
nuestra exigencia,
nuestra libertad:
destronar Vuestro Mutismo
Y SER VUESTROS DEICIDAS
para rescatar la verdad
y salir de ésta gran estafa divina
con la que nos quereis sepultar.
del Espacio Infinito,
aquí estamos,
aquí seguimos,
en la rutina diaria
del mono-vestido:
empujadores de rocas
que vuelven a caer
después de depositarlas
en sus sitios:
una y otra vez,
noche y día,
contínuo trabajo sísifico
es nuestro destino:
¿Por qué,
Diosas y Dioses
de los Espacios Infinitos?
¿Cúal es nuestro pecado,
cúal fué nuestro delito?
Nunca contestáis.
Nunca abríis los candados.
Todo lo tenéis cerrado.
Todo es silencio,
indiferencia,
en vuestros Espacios Infinitos.
Y al preguntáros quíenes somos,
adónde vamos,
de dónde venimos,
un silencio sepulcral
inúndan nuestros sentidos,
y vuestro Universo,
displicente,
distante,
frio,
nunca responde
en su Inmenso Vacío.
Y aquí estamos,
y aquí seguimos;
pero no nos resignamos:
es una rebelión metafísica,
antropológica,
a dos manos,
que se alza y ruge de impotencias
en vuestros Mutismos Infinitos.
que nos tienen condenados.
Porque, sin consultarnos,
nos hacéis llegar,
y, sin preguntarnos,
nos hacéis sacar;
y entre este alfa y omega
nunca encontramos la paz,
tenemos que esperar a la lapida funeraria
para que nos escriban en ella
ese epitáfio significativo y mortal;
porque en vida
siempre vamos recorriendo meandros
de ríos sin desembocar,
buscando un balance
que no podemos encontrar;
y para colmo nos daís una cabeza,
en contradicción con el cuerpo,
con nuestra esencialidad,
que nunca descansa,
que sólo atina a cuestionar,
que sólo escarba sin hallar,
y no hallamos cobijo
o un lugar para reposar.
Vuestro gran profeta, Cristo,
nos lo dejo dicho sin dudar:
"Las aves del cielo tienen sus nidos
y las alimañas sus guaridas,
pero el Hijo del Hombre
no tiene dónde apoyar su cabeza."
¿Por qué?
¿Es que tanto nos pesa?
¿Es que tan morbidamente nos ha crecido
que ya no podemos sostenerla?
¿Por qué,
Diosas y Dioses de los Espacios Infinitos?
¡ Responded de una vez !
¿Cual fué nuestro pecado?,
¿Cual fué nuestro delito?
En la Naturalez todo encaja en su lugar,
todo esta en armonía,
en equilibrio ancestral,
entonces:
¿por qué el hombre
es el único animal que naufraga
si es el único con inteligencia para navegar?;
¿es que adquirió esa 'inteligencia'
por Medios Fraudulentos
que se esconde a sí mísmo
para no descubrir su mal?
Me dicen el tópico, sin pensar,
que así fué, es y será,
que así somos,
que así es la Naturaleza;
que en este sentido,
es irrisoriamente inútil sublevarse
contra la desaficción
de Vuestro Cósmos
que nunca nos permite descifrar
éste Tremendum Conundrum
de la Vida y la Muerte,
resolver ésta enajenación existencial,
(estar en 'un aquarium' separados
de Todo por 'unas paredes de cristal')
dónde habéis encerrado
nuestro artificial cortex cerebral.
Pero os desafiamos a contestar,
porque estamos seguros
que en otras partes del Universo,
ésta patógena cabeza humana
(de la que Cristo habló)
ni ha existido ni existirá,
que somos tan sólo un capricho,
una anomalía de Vuestros Sueños
dónde algo se descompuso al final,
un DNA doblado,
un Azar Fatal,
un programa mal interpretado,
un canibalismo de 'frutos prohíbidos'
que nos sacó del paraíso terrenal,
alguna transgresión debió pasar
...porque lo que ocurrió,
en nuestra evolución,
es algo que nunca,
en vuestos Espacios Infinitos,
tuvo lugar,
y la eviencia es este presente
al que hemos arribado,
éste 'cul-de-sac' dónde,
al solucionar un problema,
creamos mil más:
¿es eso normal?,
¿es esto Natural?
Contestad.
Esta hiperdesarrollada cabeza humana
no surgió por evolución natural,
esta 'testa' que produce
un contínuo descontento,
una dicotonomía en nosotos mismos,
con nuestros congéneres
y con la Naturaleza,
es la que ha producido
la cultura,
las ciencias,
la filosofía,
los mitos,
la religión,
tratando de hallar una respuesta
a tal desorientación,
pero todo ha sido en vano:
nada ha podido detener
el naufragio de la civilizacion,
cada día con mas problemas,
con más destrucción.
Por eso os peguntámos:
¿Qué nos ha pasado?,
¿Por qué nos habéis castigado?.
Diosas y Dioses
de los Espacios Infinitos,
salid de vuestro Silencio,
responded,
es lo único que necesitamos;
dejad que nuestro destino sísifico
siga subiendo la roca,
no nos quejamos,
(ya estamos acostumbrados)
pero ahora,
cuando ya estamos a punto
que de ésta vida seamos eliminados,
sólo queremos saber,
conocer,
qué acontenció con el "homo sapiens"
que vosotros, un día,
arrojásteis afuera de la Naturaleza
por un delito, por un pecado,
por haber cometido una "desobediencia"
en el Jardín del Eden
...la cual aún no se nos ha explicado;
y tenemos derecho a saberlo
antes de ser, de nuevo,
a lo inórganico tirados.
Diosas y Dioses
de los Espacios Infinitos,
sabéis muy bien de que hablamos,
¡ no esconderos !,
¡ salir a contestarnos !,
¡ romped vuestro Silencio!,
responded a esta oración
que a vuestros Espíritus elevamos
...porque aunque otros se conformen,
nosotros no nos conformamos,
sufrimos la sentencia,
pero no la aceptamos,
es la única forma
de, con valentía,
cumplirla porque estamos atrapados,
pero nos rebelamos,
y en ésta Insurrección
contra Vuestros Designios
radica nuestra única opción,
nuestra protesta,
nuestra exigencia,
nuestra libertad:
destronar Vuestro Mutismo
Y SER VUESTROS DEICIDAS
para rescatar la verdad
y salir de ésta gran estafa divina
con la que nos quereis sepultar.
