¿Existe un objeto en su ausencia?
Silencio
Me he quedado solo en casa.
La casa se ha quedado sola en uno.
Es como una simbiosis dónde contenido y contenedor se devoran mutuamente en eternos turnos.
(Un hombre solo no vale nada.
Es más: un hombre solo es menos uno.
No llega ni a uno)
Afuera, el viento mece al alto olmo como si en el balet
de sus balanceos nos quisiera decir algo que no penetra.
Junto a la ventana un pájaro negro de ojos metálicos
se ha quedado parado mirándonos profundamente
como si supiera...
La tarde desdibuja máscaras.
El sol, en el ocaso, diluye dudas.
Afuera no hay nada solo,
aislado,
todo está ensamblado ,
armonizado,
dentro de la Naturaleza,
donde no hay nada separado.
¿Será verdad lo que dijo Paúl Valery
de que un hombre solo siempre está
en mala compañía?
¿Será que al quedarnos a solas en casa
es como si nos quedaramos solos
en el entero Planeta, en el entero Universo,
y la ausencia de lo que no presenciamos
deja de existir?
Ego solus ipse.
Solamente yo existo.
Y dejamos de compartir con los otros
la existencia,
la vida...
equipaje que pesa demasiado
para llevarlo sin que nadie nos ayude
a llevarlo a cuestas.
a llevarlo a cuestas.
¿Estará aquí esa mala compañía
a la que se refiere Valery?
No es cierto que el entero Universo esté dentro de nosotros, es que, no es solamente que en el entero Universo no existe nada parecido a nosotros --y sea ajeno a nosotros--; es que al entero Universo le importamos tres pepinos fritos el que estemos aquí o no.
Y al quedarnos a solas con nosotros mismos,
sin la ayuda del trabajo en equipo
que hacemos con los otros para combatir
ésta mortal isla humana,
lo comprobamos.
Y ésta podría ser esa mala compañía 'valeryana'
Y al sentir ésta verdad
nos acompañamos con ella
Y al sentir ésta verdad
nos acompañamos con ella
Es la única redención ontológica
que cabalga entre la ausencia y presencia.
...........
Ahora es de noche
Hablan los grillos
Los pájaros ya están en sus nidos.
Un aire arrastra de vez en cuando
hojas secas con un extraño ruido.
Descansa la locura.
Se abren los postigos.
La Nada nada en aguas que nunca vimos.
La noche no son sombras
--puedo ver en ella todos los destinos--
Es ausencia lumínica
Es presencia de estrellas lejanas
de luces que estan en camino
En la noche, la soledad deja sus brillos,
y ese hombre que solo no vale nada
cobra una especie de metafísico castillo
dónde se adentra en el riesgo
de no poder regresar por el mismo camino...
