Día de pirámide truncada.
Geometría quemada.
Por la erosión.
El viento.
Las ideas.
Los sentimientos.
El agua.
Los glaciares que con el frío
corren y avanzan.
Ápice y zenit
cortados en sus gargantas.
Truncado el hombre.
En sus caminatas.
En la realidad que lo aplana.
Día de pirámide truncada
dónde desaparece el vértice
que unía las tres caras.
Las mil caras de las figuras
que llevamos arrastra.
Todo está truncado
en éste día de hachas.
Todo son cuchillas
que cortan la cúspide
de nuestras atalayas
para quedarnos
en una meseta árida
...sin el punto de referencia
dónde todo se balanceaba.