Hoy en día,
los Grandes Crimenes Contra la Humanidad
son tan espantosamente impunes y repulsivos,
tanta sangre, dolor y lágrimas
conllevan sus atroces suplicios,
que huelen más que todos los cadáveres
juntos del mundo,
por lo tanto hay que aplicarles
el mismo método que a aquellos:
enterrarlos cuánto antes para que,
rápidamente,
pasen a ser ese otro Gran Crimen
que nos hacen cometer sin sentirlo:
EL OLVIDO.
Los que manejan los hilos de la llamada 'Comunicación' ahora 'Incomunican'
el Terrorismo y las Atrocidades
que sus mercenarios estan cometiendo en Libia.
Libia ya no es 'Noticia'.
Ahora ya no hay que proteger
a la 'población civil'
que es asesinada,
torturada,
encarcelada,
exilada.
Ahora 'todo está bien'
y no hay que mandar
"operaciones humanitarias".
Todo está reglamentado
por el agua,
la tierra,
el petróleo,
el gas natural,
las riquezas
y Todo lo Robado
que ha pasado a engrosar
el botín que ya Wall Street
guarda en sus sótanos.
Ahora ya no hay tiranos
...¡ la Libertad ha arribado !
dijo el presidente del $anto Oficio.
Al mismo tiempo,
la mismísima coartada burguesa
de los "derechos humanos"
que le sirve de Caballo de Troya
a la oligarquía internacional
para penetrar en sus sitiadas plazas,
'Amnesty International',
no ha tenido mas remedio
que pronunciarse al respecto
con un informe que lleva por título:
"Lybia: Death of Detainees
Amid Wide-spread Torture".
Si.
Libia ahora es el Infierno de Dante,
con la diferencia,
algo que nunca pudo imaginar Dante Alighieri,
de que ese dantesco Infierno
conlleva 'libertad':
The Libyan people
can now celebrate their freedom.
Los Crimenes contra la Humanidad
hay que enterrarlos rápidamente
para que su hedor no despierte
el olfato de la conciencia.
Por eso Libia ya no es Noticia
y yace en la fosa común del Olvido
que del olvido se llama,
al que van a despenarse, vidalita,
los moribundos del alma.
Para no pensar en vos,
bajo el árbol del olvido,
me acosté una nochecita, vidalita,
y me quedé bien dormido.
Al despertar de aquel sueño
pensaba en vos otra vez,
pues me olvidé de olvidarte, vidalita,
en cuantito me acosté.
Pero a veces pasa,
como dice Victor Jara,
que en ese 'árbol del olvido'
dónde 'nos acostamos una nochecita,
vidalita,
al que van a despenarse
los moribundos del alma'
por tantos puñales como nos clavan
...para no pensar,
para olvidar,
al despertarnos nos damos cuenta
de que nos hemos 'olvidado de olvidar'...
Y ésta es la esperanza
con la que no cuentan
los Gangsters de la Humanidad.