Decía Marx que "el arma de la crítica no puede sustituir a la crítica de las armas, que el poder material tiene que derrocarse por medio del poder material, pero también la teoría se convierte en poder material tan pronto como se apodera de las masas. Y la teoría es capaz de apoderarse de las masas cuando argumenta y demuestra ad hominem, y argumenta y demuestra ad hominem cuando se hace radical. Ser radical es atacar el problema por la raíz. Y la raíz, para el hombre, es el hombre mismo."
Y, sobre todo -ni que decir tiene-, es en el plano antropológico que la raíz, para el hombre, no es que ya sea el hombre mismo, sino que el hombre mismo se convierte en TABU para el mismo hombre.
Pero este no es el campo de estudios de Marx y Engels porque la antropología marxista (reflejo de los límites de sus circunstancias históricas) está circunscrita al trabajo de Engels en "El papel del trabajo en la transformacion del mono en hombre", lo cual, como fácil se comprenderá, no podía involucrar ningúna rareza evolutiva por la sencilla razón de que si de lo que se trata es de transformar el injusto, alienante y canallesco mundo en el que vivimos, lo que tenemos que hacer es luchar para cambiar el cosmos que se ha construído, lo que Marx expresaba en estos términos: “Los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo”...transformarlo, cambiarlo, y es esa rareza evolutiva, el hombre, con la que hay que llevarlo a cabo, no tenemos otra. De cajón.
Pero, claro, ello no puede impedir el hecho de investigar, antropológicamente, y tratar de dilucidr qué carajo es la Criatura Humana que lleva un millón de años, desde Atapuerca, y no es solamente que no hayamos encontrado el Hilo de Ariadna para salir del Laberinto, es que cada vez estamos más lejos de ello porque con cada problema que solucionamos creamos mil más en una cadena sin final, y esto, en el ser más inteligente de la Tierra, levanta muchas interrogantes que cada vez nos cuesta más explicar.
En el Templo de Delfos está ésta máxima inscrita: "Conócete a ti mismo". El punto débil del marxismo es su ANTROPOLOGIA, simplemente, porque el trabajo no es lo que ha hecho el hombre: es al revés: es el hombre el que ha heho al trabajo, son sus carencias lo que creó la necesidad de trabajar, y quizás, quizás, este sea el nudo gordiano sobre el que tiene que ser corregido el marxismo, que el hombre no es lo que el marxismo cree que es, y el presente histórico, la LOCURA actual en la que se encuentra la Humanidad, excede, y con mucho, a la lucha de clases. Porque el desarrollo tecnológico, por ejemplo, que nos ha catapultado a la MAD, Mutual Assured Destruction (armas nucleares), repetimos, excede, y con mucho, a la lucha de clases para entrar de lleno en un delirium tremens que se sale de la racionalización marxista para presentir y sentir esa mencionada rareza evolutiva la cúal no puede escapar a la fenomenología y los evidentes hechos que la sustentan. Y de aquí que no haya mayor TABÚ para nosotros que nosotros mismos (¿Qué ocultamos?) El "Conócete a ti mismo" tiene aqui su caldo de cultivo.