ASI DEBIO DE HABER QUEDADO ZANJADO
ESTE ASUNTO
'Yo no sé
si soy yo
o el mundo
que está al revés'
El Terror era su táctica y en su regimiento de la salvaje guerra colonial en Africa encontró la expresiva herramienta que más tarde le llevaría a tomar el máximo poder en España dejando a todo un pueblo perennemente aterrorizado por el Miedo lo que le llevó,
no solamente a gobernar por cuatro decadas,
sino a dejarlo todo lo suficente-mente
Atado y Bien Atado, ABA,
como para establecer
a sus Sucesores borbónicos,
vitaliciamente, regentores del Estado.
--Desde su regimiento de Terror en Africa
--Pasando por los cientos de fusilamientos
en la represión de los mineros asturianos
en 1934
--Y el Horror del Holocausto
del pueblo español
--...Murió matando hasta el final
de sus días cuándo tan sólo dos meses
antes de morir mandó ejecutar
a cinco luchadores antifascistas
(Lo mismo que en Africa mandó fusilar
a un soldado por protestar por la comida)
--Comenzó manchado de sangre
y terminó manchado de sangre
--El color rojo lo persiguió toda su vida
--El trauma que causó es fácil de adivinar.
--Pero a él no le causo nada...
dormía a pierna suelta:
--"Y todo sin que ello le perturbara
nunca su sueño"
(Paul Preston)
--A uno de los casos mas teratológicos
de la história lo trasladan mañana
al cementerio familiar.
--Tuvieron que pasar 44 años
para que el régimen supiera
que ya estaba asentado
y protegido lo que había
que perpetuar.
Con razón
su primer Sucesor
dijo de él:
Vaya banda de Gangsters y Delincuentes...!
(El New York Times calcula que la fortuna
del 'rey Emerito' se eleva
a 2.000 millones de euros)
El Terrorismo, el de los ricos, claro,
proporciona sabrosos resultados.
¿Y las gentes...?
¿Qué piensan?
¿Qué dicen?
¿Qué sienten?
¿Cúales son sus intereses?
¿Por dónde caminan?
¿Adónde van?
¿De dónde vienen?
Carecemos de respuestas
a todas esas interrogantes y vertientes
Como decía Mario Benedetti:
Cuándo me aprendí todas las respuestas
me cambiaron todas las preguntas.
Nos han cambiado todas las preguntas
y ahora nos cuesta vaciar el vaso
para volverlo a llenar otra vez.
O como dicen Gilberto San Rosa
y Ruben Blades:
Yo no se si soy yo
o el mundo que está al revés...
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PD:
No podemos terminar sólo mencionando a quíen sale, tenemos también que decir quíen se queda: se queda --todos los días oyendo misas en la Basílica-- el Jefe de los Escuadrones de la Muerte, José Antonio Primo de Rivera, que, con su dialéctica de los puños y las pistolas, encharcó a España de rios de sangre con los que iba purgando y limpiando la España que liberaba el Igneo Terrorista ferrolano.
Tuvo la mala fortuna de ser cogido con las manos en la masa de sus repugnantes crimenes y, por lo tanto, fusilado.
Pero parece ser que los dóciles y acoquinados súbditos del reino borbónico, después de ochenta años de aguantar carros y carretas, se conforman con bien poco y, hoy por hoy, tienen suficiente conque salga uno sólo, el Jefe de todo el Aquelarre.
Queremos imaginarnos que, después de tanto tiempo juntos, al despedirse el uno del otro, se habran tenido que cruzar algunas palabras de goodbye. Y los dos estuvieron de acuerdo en que la salida del Jefe iba a ser tan sólo un biberón para calmar a la criatura que últimamente no dejaba dormir a sus padres por la noche con tanto llanto.
A partir de aqui, el abogado José Antonio, continuó, a nivel de letrado, elaborando más nítidamente lo que iba a pasar, lo que ya estaba pasando: te van a sacar porque ya has quedado bien metido e institucionalizado en los españoles, ya no haces la misma falta que antes, máxime cuándo ya tienes a tus sucesores para que continúen el trabajo de seguir con lo que dejastes planeado de que todo se quedara amarrado y bien amarrado. Y la evidencia de lo que digo se puede ver, preguntando, ¿por qué ahora, después de cuarenta y cuatro años, y no antes, se ha dado éste traslado? La respuesta a ésta pregunta está en lo que te he contado. Porque mi caso es otro, es distinto: me pueden dejar aqui porque a mi me fusilaron tan sólo cuatro meses después que tú distes el Golpe de Estado, sólo mis gentes se quedaron y, desde luego, bien indoctrinadas por mi, cumplieron con su trabajo, primero, aplicando los "puños y las pistolas" para amedrentar a la chusma en cualquier lado, después, limpiando España de indeseables y milicianos cuándo tí liberabas cada pueblo, cada ciudad, cada campo, para asentar las bases del nuevo estado, pero en ésto último ya yo no estaba, ya había desaparecido del escenario y de todas las hecatombes que tú después llevarías a cabo. Asi que tu sales y yo me quedo aquí con ésta hermosa benedictina orden que perpetua y defiende los principios de nuestro Movimiento sagrado...
El caudillo no dijo nada.
Se había quedado dormido
esperando que levantaran la losa
para reunirse con los suyos
que lo estaban esperando
al grito de ¡Viva España!,
¡Viva Franco!.
