Revolviendo en los viejos papeles
me encontré con tú carta.
Y la volví a leer.
Tú carta.
Siempre original, sulfatada, disidente, corrosiva, surrealista, llena con esos tropos y lagunas de corrientes que denuncian y advierten sobre la situación de éste mono vestido envuelto en sus falsas túnicas, esos parámetros que tú tan bien conocías desde La Société des Observateurs de l'Homme a la que honoríficamente pertenecías.
...vamos a cumplir con el santo ritual de la felicitacion. ¿Qué felicitamos? quizas el hecho de habernos incorporado - involuntariamente- a la existencia, quizas el que un año mas sigamos vivos ambos, el que felicita y el felicitado. En todo caso nos alegramos de seguir viviendo. Esto es el optimismo metafisico en estado puro, la negacion absoluta de la tragedia vital.
¿Quién dice éstas cosas?
Pues un miembro de la Sociedad de los Observadores del Hombre. ¿Existe hoy en día esa Sociedad?. No. Esta en la cárcel o exilada o comprada. Hoy no hay observadores. Hay padecedores. Y los que padecen no pueden observar lo que sucede. Lo que llevamos dentro. Lo que ocurre afuera. Lo que el timón descompuesto de la nave acarrea.
Si. Verdaderamente, el optimismo --el metafísico o el físico sin meta-- siempre está causado para contrarrestar la negación --absoluta o relativa-- de la tragedia vital que acarreamos y que es precisamente lo que nos niega. Y negar lo que nos niega es siempre muy positivo, muy sano. Es, simplemente, la salvadora dialéctica, ese bote-salva-vidas sin el cual naufragaríamos en tierra.
Un servidor, en el pastel de cumpleaños, siempre --desde que voy de polizón en el barco-- ha escrito la frase de don Pedro Calderón de la Barca "el mayor pecado del hombre es el haber nacido"; pero el 'pecado' --la transgresión-- va mas unido al plano filogenético que al ontogenético; porque lo individual nunca es 'pecado', en todo caso 'desliz empujado', unas contracciones musculares que nos empujan a salir a un mundo dónde nadie nos ha llamado.
Es posible que la muerte de la libido sea un recurso para avanzar en la contemplation zen y sentir una leve compasion hacia los animalitos parlantes, escribientes, narcisistas, y definitivamente aburridos moribundos, con los que compartimos especie.
¡Ay, ya te abriste la bragueta!
Por algo tenías toda la colección de manuscritos de Don Segismundo. Pero yo creo que al Zen también se puede ir en erección, ¿por qué no? ; todo depende si hay cachondas monjas en el convento.
En lo que si estoy de acuerdo es en que la compasión no es 'erectil', y toda ésta fuerza que no se alza se pone a disposición de apiadarnos de los otros; ésto si que podría ser; decía el loco-sabio de Nietzsche que la compasión es la carnada que ponemos en el anzuelo para coger al pez y comernos a nuestros compañeros de viaje: esos aburridos moribundos
aburridos moribundos, con los que compartimos especie.
Otra vez
Ya te metiste a desvalorizar la especie!
'Aburridos moribundos'
Otra vez con tus blasfemias.
Pero la verdad es, precisamente, una blasfemia.
Asi que te lo pasamos.
La clave esta en el aburrimiento. El hombre nace aburrido, no sabe que hacer, como resolver su estancia terrenal.
Coño, ésto si que es un axioma.
El sapientissimo es el único ser, en todo el Universo, que se aburre, que no sabe qué hacer (¡con todo lo que hacemos y no sabemos qué hacer!), que no sabe el pobre como solucionar los intríngulis de su paso terrenal. Ningún académico le ha metido mano al tema ontológico del aburrimiento humano...debe ser un tema muy aburrido, y, por supuesto, peligrosísimo.
Nosotros creemos que es debido a que como somos el único ser en éste planeta que está afuera de la Naturaleza, (expulsados --por transgresores--), nos aburrimos sin ella. Dos ángeles, con espada de fuego, nos cierran el paso al Arbol de la Vida --dice el mito-- Porque la Vida es de todo menos aburrida...al menos, claro está, que no te hayas quedado afuera de ella.
Si es pobre, primitivo e ignorante tiene garantizada una vida llena de acion y aventuras, puede dedicarse a cazar, robar y violar, con lo cual, mas los tiempos que pasa encarcelado, transcurre su vida de forma agradable, sin sobresaltos ni angustias, sin necesidad de leer o ir al psicoanalista. Si por el contrario ha superado el estadio de las necesidades elementales, ha estudiado y sabe leer y escribir, su porvenir sera incierto, problematico y aburrido.
Aquí hay sabiduría.
Y de la mejor clase: la empírica
Si. El primitivo, el 'incivilizado', es el que, nadando siempre en su intensa existencia y recorriendo a cuerpo limpio las interperies de las aventuras de la vida, nunca, nunca se aburre. Claro que después llegan los misioneros, le dicen que tiene alma y que aplace en ésta tierra lo que después se le recompesará en el cielo, y el hombre, o estrangula al misionero o termina aburridamente marcando el paso con los miembros de la tribu que ya van vestidos con pantalones.
Para compensar este desastre no tiene otra solucion que inventar toda clase de disparates, de teorias absurdas, cuyo inventario seria infinito, desde inventar religiones hasta crear el premio Nobel o bien, desesperado y asfixiado por todo lo que llamamos cultura, sociedad del bienestar y economia neoliberal, descubre el unico medio para divertirse realmente: organizar guerras, revoluciones, incendios, redes pedofilicas o cualquier otra forma de terrorismo.
Meto de golpe todo el párrafo porque creo que no hay ningún desperdicio en él.
Te lo has cargado todo.
No sé si lo supistes.
Todo.
No has dejado títere con cabeza.
Todo ha sido aniquilado.
Ahora ya no podemos creer en nada.
La cuestión sería preguntar --sin interrogantes-- si antes de ese párrafo creíamos de verdad en algo.
Creo que tampoco.
Entonces es un alivio.
Gracias.
Y encima me recomiendas:
...fervientemente que -- en mi santo cumpleaños-- lo pases practicando cualquiera de estas actividades lúdicas.
No tienes principios, ni moral, ni la mas mínima...como diría...moderación, y, sin embargo, eres un burgués...qué cosa mas curiosa, ¿no?
Ni respetas ni moderas.
En ésto eres un revolucionario anarquista
Nunca entendí esta dicotonomía en ti.
Es como si hubieses sido siempre 'un burgués desempleado que no encuentra trabajo' y se va a los piquetes de las huelgas con bombín y el sello de palacio.
Y claro, ¿qué puede producir ésta anomalía?
Pués un destructor, pero acorazado en su clase, claro,
y rodeado de una fragata de barcos (bien equipados) para que lo protegan.
Y, sin embargo, y aúnque parezca paradójico, éste fue tú lado artístico porque supístes llevar ésta contradicción con medios estéticos.
Lo estético hipostasiando la praxis
Decías en tú "Manuscrits de Pompeia" (A):
"Una de les conseqüències de la pràctica d'aquest art és el desig d'eliminació de la pobresa o de la ignorància, no per convicció marxista, sinó per bon gust, per restaurar l'equilibri harmònic del paisatge"
Pero saltándote ese equilibrio harmónico del paisaje y volviéndo a esa dicotonomía de marras en ti....¡me incitas a que, al final, ponga bombas!:
Un fuerte abrazo para toda la family... si los quieres puedes dejar que te acompañen en tu dia de alegria y pongan bombas en algun organismo oficial, se lo pasaran en grande, te lo aseguro.
Esto ya pasa de castaño oscuro
Eres el colmo
No te detienes ante nada.
Ahora te lanzas a la guerra contra los organismos oficiales y además me dices que ¡vaya con toda la familia a ponerles bombas..!
Que pena que no se pueda hacer
Si así se hiciéra, el mundo sería otro.
Mas inteligente y divertido.
Menos aburrido.
Pero no es ésto lo que quieren.
Pero mientras lo queramos unos pocos o unos muchos, esos que revolviendo en los viejos papeles
nos encontramos cartas viejas como ésta,
habrá albas y promesas en las estrellas,
ese quilibri harmònic d'un paisatge
que nos están desbalanceando
Dedicatoria del libro: