tu Rocío,
Fernando,
el de todos aquellos que Pensamos,
y nos acordaremos de tí al ser testigos
valientemente y honestamente,
describistes en tu histórico documental.
FRV fue uno de los representantes del nuevo cine andaluz y en 1980 tenía una carrera prometedora por delante. Su documental consiguió el primer premio del Festival de Cine de Sevilla en 1982 y fue presentado como candidato por España para el Festival de Venecia junto con "Ópera prima" de Fernando Trueba.
Ficha técnica
- Guión: Ana Vila.
Fotografía: Victor Estevão (Color).
Direstor: Fernando Ruiz Vergara.
Música (temas): Música arábigo andaluza (Orquesta marroquí de Tetuán), Officium Hebdomadae Sanctae (Tomás de Victoria, siglo XVI), Estampie y Estampie 'Retrove' (anónimo, siglo XIV), Emigrantes y No me quiero acordar (Los Romeros de la Puebla), Herramientas (Himno final, Salvador Távora).
Ilustraciones: Josefa María Pérez Domínguez (vecina de El Rocío, dibujos de la leyenda), Francisco de Goya (grabados, "Los desastres de la guerra").
Producción: Ana Vila (directora de producción).
Productora: Tangana Films, PCA (Producciones Cinematográficas Andaluzas).
- José Hernández Díaz (catedrático de Arte de la Universidad de Sevilla), Isidoro Moreno (Antropólogo social), Francisco Gil Delgado (Canónigo de la catedral de Sevilla, Ex-capellán de la Hermandad de Gines), Miguel Díaz Gil (Hermano Mayor de la Hermandad de Almonte, 1977), Santiago Padilla (Presidente de la Hermandad matriz, Almonte), Manuel María González Gordon (Marqués de Bonanza, Propietario de las bodegas González Byass de Jerez), Manuel Caballero (Secretario de la Hermandad de Jerez), Pedro Gómez Clavijo (vecino de Almonte), José Aragón Domínguez (vecino de Almonte hasta 1939), Encarnación Vázquez Bejarano (Protagonista de un milagro de la Virgen del Rocío), Eloísa María de las Damas Moreno (voz).
Atraído por la Revolución de los Claveles se instaló en Portugal —país con el que mantendrá hasta el final una intensa relación— aquí llega a fundar la librería Iberlibro en Lisboa y el Centro de Intervenção Cultural desde donde organiza diversos ciclos de cine político, prohibido en España.
La visión histórica, política, social y antropológica de la famosa romería andaluza plasmada en su documental, estrenado en 1980, levantó y sacudió a la España franquista agazapada tras la trancisión
Bastaba mencionar la estrecha relación de la Iglesia y la hermandad rociera con los trágicos sucesos en los años de la guerra civil y ponerle nombre y rostro a algunas de las víctimas y victimarios locales de la represión, para que se pusieran en marcha los mecanismos de la Inquisicion contra la obra de un joven y prometedor realizador.
En 1984 el Tribunal Supremo no admite el recurso de los autores y hace firme la sentencia que condena a Fernando Ruiz a dos meses y un día de arresto mayor, 50.000 pesetas de multa y una indemnización de 10 millones de pesetas.
Al mismo tiempo, se prohibía la proyección y distribución de Rocío en tanto no se suprimieran varias escenas. Pero Fernando se negó rotundamente a ello.
La vida privada y profesional de Fernando Ruiz Vergara quedó destrozada, autoexiliandose en Portugal dónde trabajó de manera intermitente en algunos proyectos para televisión y para diversas productoras.
En los últimos años, la película ha vuelto a estar en candelero gracias al movimiento por la recuperación de la memoria histórica que la ha exhibido en numerosas localidades españolas.
A Fernando Ruiz Vergara le fue negado un reconocimiento en su propio país, por un cúmulo de circunstancias dónde el sistema jurídico no existía --ni existe-- afuera del control político del "atado y bien atado" que ponían y ponen de manifiesto la falsa y “modélica” transición.
Fernando Ruiz Vergara murió el 12 de Octubre del 2011 en su humilde morada de la pequeña aldea Escalos de Baixo, cerca de Castelo Branco, Portugal, rodeado de sus amigos portugueses a los que tanto amaba y olvidado del 'reino de España' lo mismo que tantísimos exilados que tuvieron que vivir y morir lejos de su patria que sigue con el mismo grito de Millán-Astray: "¡Muera la inteligencia!"
Hasta su lecho de muerte llegó la Blanca Paloma que se posó sobre él para darle su bendición por haber llevado a cabo en su documental las genuinas enseñanzas de Cristo: la verdad y la justicia de haber plasmado en su film Rocío la voz de los sin voz.