"Este domingo una vez más llegan elecciones.
El ritual de la falsa democracia española
donde se aparenta que votando
se pueden cambiar las cosas,
mientras que los verdaderos órganos de dirección
se encuentran en otra parte,
especialmente en el poder económico que nunca se vota"
17/12/2015
:: Nacionales E.Herria
20D – Domingo electoral
Si
Es verdad: el poder económico nunca se vota,
es invotable, impermeable, y está por encima de demo's y cracia's lo mismo que la fé religiosa está por encima de la razón.
Y si los poseedores del capital, los propietarios, el privilegiado club de la clase dominante, quedan al margen de poder ser elegidos, lo único que es opcional es invitar a las gentes a un cambio para no cambiar, que elijan quienes seran los administradores públicos de éste monolítico poder económico, sin alterar, naturalmente, la dinámica institucional de las relaciones de dominancion que conlleva el Estado burgués que convoca a "elecciones".
"El gobierno del Estado moderno no es más que una Junta que administra los negocios comunes de toda la clase burguesa".
Esta fórmula sucinta, que los dirigentes de la socialdemocracia consideraron y consideran una paradoja periodística, una caricatura propagandística para inducir a la confusión, contiene, de hecho, la única teoría científica del Estado.
La democracia creada por la burguesía no es una bolsa vacía que puede ser llenada sin problemas con cualquier tipo de contenido de clase.
La democracia burguesa sólo puede servir a la burguesía. Es tautalógico.
El capitalismo, por ser una Plutocracia
dónde gobiernan los ricos,
es, par excellence, antidemocratico.
Es que no puede ser de otra forma.
Y el axis-mundi de ésta ecuacion consiste en el fantasma de hacer votar a las gentes
y hacerles creer que "si se puede"
Lo que nunca se especifica es qué se puede y para quíenes. Esto se hace superfluo e innecesario.
Votar es sinónimo de elegir,
de poder, de determinar, de influir,
y con éste abstraccismo de gabinete en marcha,
ya nadie se preocupa de indagar
cúales son las efectivas y concretas consecuencias
de ello, y, sobre todo,
debido a que la sociedad está compuesta
por antagónicos e irreconciliables interes económicos,
no se pregunta a qué clase social beneficia cada partido contendiente en las elecciones...
como si el arsenal social estuviese compuesto por una gran familia con intereses comunes.
Porque lo mismo que Cristo dijo que
"No se puede servir a Dios y al dinero. Porque nadie puede servir a dos señores, porque aborrecerá a uno y amará al otro, o bien, se interesará por el primero y menospreciará al Segundo",
de la misma manera es absurdum el mantener que un determinado partido político pueda defender, al mismo tiempo, los intereses de distintas y contrapuestas clases sociales.
Los discursos de los partidos politicos van todos en la direccion de exponer la mejor forma en la que van a administrar los negocios burgueses, de manera que, la "mayoria", pueda obtener las maximas ganancias, los mas optimos beneficios. Nunca se definen como defensores de tal o cual clase social...como si éstas no existieran en absoluto. Indudablemente, el individuo, buscando la praxis de sus intereses, votará por quienes le hagan ver que "con ellos" estará mejor que "con otros".
Este es el fantasma que recorre España:
el fantasma de las "elecciones"
dónde se decide la forma sin tocar el fondo.
El fantasma de elegir los miembros
de la nueva Junta que sepa administrar
de la mejor manera posible
los negocios y cambalaches la clase burguesa
Porque, dependiendo de qué clase de administración,
el votador se sentirá más o menos protegido
que de haber elegido a otros administradores.
Lo que ocurre es que éste fantasma,
en su total corporeidad funcional,
sólo aparece, en su plenitud significativa
--como, por ejemplo,
ahora está apareciendo en Argentina--,
después de que hayan pasado las elecciones,
cuándo los oligarcas y sus corruptos testaferros,
que controlan el capital burgués,
eligan, con los votos de las urnas privadas
de sus omnímodos poderes económicos,
lo que debe de ocurrir
y lo que debe ser eliminado.
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"I ALWAYS REGARDED BOURGEOIS DEMOCRACY WITH SCEPTICISM.
ANATOLE FRANCE REMARKS SOMEWHERE THAT
'RICH AND POOR ALIKE ARE FORBIDDEN TO SLEEP UNDER BRIDGES'.
I ALWAYS DISTRUCTED THIS NOTION OF EQUALITY".
George Lukács.
A mi me pasa lo mismo:
'siempre he mirado a la democracia burguesa
con escepticismo' ,
y nunca --al igual que Lukács-- he creído
en ésta 'nocion de igualdad'
...y cuándo llega el fantasma de las 'elecciones'
compruebo cabalmente ésta verdad.