http://insurgente.org/index.php?option=com_content&view=article&id=6267:nuestro-amado-mubarak&catid=1
"....Bueno, pues ahí va mi particular encuentro o análisis comparativo entre nuestro amado Juan Carlos I y el muy odiado Mubarak; y no se me sorprenda en demasía el lector si salen del mismo muy empatados e igualaditos:
El tal Mubarak, hasta hace unos días presidente de Egipto y capitán general, subió al poder tras un golpe de Estado desatado en la sombra después del asesinato del presidente Anwar el Sadat. Juan Carlos I, todavía rey de España, alcanzó el trono también como consecuencia de un golpe de Estado (el de Franco) ya que fue este dictador y genocida el que le nombró general del Ejército y heredero de su Movimiento fascista “a título de rey”.
A Hosni Mubarak se le relaciona con el asesinato de su predecesor, el presidente Sadat, cometido durante un desfile militar. Mubarak estaba al lado de su jefe en la tribuna en el momento del magnicidio y el pelotón de soldados asesinos que mató, además de a Sadat a otras once personas, respetó milagrosamente su vida. El rey Juan Carlos (según reconoció él mismo en su momento) mató con su propia pistola en el año 1956, siendo ya un cadete de la Academia Militar de Zaragoza y experto, por lo tanto, en el manejo de armas portátiles, a su hermano el infante D. Alfonso de Borbón, aspirante como él al trono de España y favorito para suceder a su padre, el conde de Barcelona, en sus derechos dinásticos. Este homicidio, por orden de Franco, nunca fue investigado por la justicia.
En el momento de su defenestración, Mubarak llevaba 30 años en el poder. Sin someterse a ningún refrendo popular real a través de las urnas. Nuestro amado Mubarak, el nuestro, el borbónico, Juan Caarlos I, ni que decir tiene (por algo es rey) que nunca se ha sometido a respaldo electoral alguno. Lleva 36 años en el trono y ahí parece ser que quiere estar hasta que su alma vuelva al idílico lugar desde el que vino, o sea, al cielo.
Parece ser que Mubarak ha conseguido en sus treinta años en el poder una fortunita de 30.000 millones de dólares, cifra que algunas fuentes bien informadas (como la ministra Chacón que se apoya seguramente en informaciones del CNI) elevan a 70.000 millones. Por su parte, el amado rey de todos los españoles, según revistas especializadas de toda solvencia, ha conseguido reunir en sus siete lustros de reinado la tampoco despreciable suma de 1.790 millones de euros (300.000 millones de pesetas), diez veces el montante de todos los sueldos recibidos en su ya largo reinado. ¿Cómo podrá haberlo hecho este campechano ciudadano español?
Durante la presidencia de Mubarak, en Egipto se cometieron centenares de asesinatos de Estado. Las organizaciones represoras del sistema nunca se han andado con bromas en cuanto a la seguridad interior, sobre todo en las personas de los autodenominados “hermanos musulmanes”. Durante el reinado de Juan Carlos I, se perpetraron en España 28 asesinatos de Estado a cuenta de los GAL, organización terrorista formada en las cloacas del sistema y dirigida desde los servicios secretos españoles (CESID). Y el rey era y es comandante supremo de las FAS, jefe por lo tanto de ese organismo de inteligencia y responsable máximo de esos crímenes institucionales.
Mubarak cometió sin duda (como todos los dictadores) continúas malversaciones de fondos públicos de su país en beneficio de su impresionante fortuna. El “Mubarak español también realizó presuntamente este tipo de delitos, algunos de ellos tendentes a pagar chantajes sexuales de una muy conocida vedette del espectáculo español.
El ex presidente Mubarak utilizó muchas veces el Ejército egipcio para mantenerse en el poder. El rey español también. Concretamente, en una ocasión muy conocida: el 23-F. Peligraba su corona y no dudó en utilizar a sus generales cortesanos para que le salvaran. Luego los abandonó.
Mubarak, obviamente, ha ejercido una corrupción galopante y continuada. El Borbón, también: yates, coches deportivos, mansiones turísticas, regalos multimillonarios de todo tipo…
A Mubarak no se le ha conocido una vida personal irregular. Los árabes para estas cosas son muy serios y se lo montan bien. Juan Carlos I, por el contrario, ha sido protagonista de todo tipo de escándalos sexuales y prácticas cinegéticas rocambolescas. Pero como este hombre es inviolable e irresponsable constitucionalmente…
¿Seguimos con la comparativa? No creo que haga falta pues necesitaría muchos folios más y para eso ya están los libros (que lo están). Amigo lector ¿Tenemos los españoles un Mubarak que echar o no? ¿Le siguen pareciendo muy exageradas mis afirmaciones en relación con la pareja Juanca/Mubarak? ¡No, aunque aquí no haya publicidad no me lo diga ahora que si me contesta en positivo voy a enfadarme mucho e, incluso, puedo entrar en la depresión pura y dura! Y eso, según dicen los médicos, no es nada bueno…"