Una contradicción insoluble en el Universo:
un antropoíde vestido
con la cabeza de "sapiens".
¡QUE LÍO!
La cabeza nos dice una cosa,
y los instintos, el cuerpo...¡quíen sabe!;
tal vez obedezca o tal vez
lo eche todo al aire,
porque, entre ambos,
si hay acuerdo es tan sólo a base
de reprimir y autoimponerse
ese 'Malestar de la Cultura' de Freud
que no le gusta a nadie...
¡QUE LIO!
En el Universo no existe una criatura
dónde cabeza y cuerpo no enlacen,
porque la Evolución Natural
nunca produce éste Desbalance,
el cual está reflejado
en el ancestral mito del Génesis
que nos describe el extraño 'percance':
una pareja que vive en armonía
entre cuerpo y cabeza,
entre la vida y la Naturaleza,
y, de pronto,
se come de un 'fruto prohíbido'
que produce la catástrofe...
Una catástrofe corroborada por la actualidad
porque continuamos comíendonos
el 'fruto prohíbido' de la misma Naturaleza:
el mar,
la tierra,
el aire...