This corresponds to a particle traveling freely through empty space. The real part of the wave function is plotted here. |
En la mecánica cuántica son famosas las ecuaciones de Schrödinger en las que se prueba --matemáticamente-- que una partícula puede estar en dos sitios, o en más sitios, al mismo tiempo. Y no se crea que las ecuaciones de marras son muy complejas, no, que vá...son parciales ecuaciones diferenciales, nada del otro mundo.
Y la clave de ello, naturalmente está en el tiempo, en el espacio-tiempo, que no tiene nada que ver con el reloj de péndulo que tengo en la pared o con el espacio domestico de tantos kilómetros o metros para estar aquí o acullá.
Existimos en una 'realidad' catacúmbica que es la que necesitamos para vivir y sobrevivir en el cosmos del "homo sapiens", nada mas: una especie de jaula sísifica donde la rutina y la cotidianidad componen las dimensiones existenciales.
Catan los grillos como si fuesen esa partícula-onda
que simultáneamente está en todos lados.
Suena la nevera como barco en todos los mares.
Yo tambien estoy en muchos sitios a la vez.
Todos estamos en la omnipresencia de muchas partes.
El Cosmos mismo esta aqui, y alli, y mas allá.
Todo se dá -y se quita- en simultaneidad..
Viajamos estando parados.
Como las particulas de Schrrödinger.
"Mi vida fue salto, revolucion, naufragio permantes (...) No me enriquezco leyendo sino viendo, oyendo, sintiendo. Y en cada viaje, la casa a cuestas, mudanzas de todo y perdida de tanto (...) Y, en cada sitio, volver a empezar..."
Juan Ramon Jimenez
Nos movemos como esa partícula viajando
--¿libremente?-- a través del vacío del espacio.
La una de la madrugada.
La casa es un barco solitario
en rumbo desconocido.
La noche es un pedazo de tierra
habitada por extrañas y misteriosas fuerzas.
Los grillos. Otra vez
(Son incansables)
Esos musicos que usa la noche
para que pensemos en ella.
Pero yo al escucharlos pienso,
y estoy,
a la vez,
en todos mis caminos,
en todos los puertos
a los que he llegado,
de los que he salido.
Hasta estoy ahora, anclado,
en los puertos a los que aún no he arribado.
Porque en el sortilegio de esta simultaneidad,
podemos estar, al mismo tiempo,
en el presente,
en el pasado
...y hasta en el futúro
que ya esta determinado.
Y ésto no lo dice Schrödinger,
lo dice el Universo que habitamos,
lo dicen los grillos que estan cantando.
Por eso ahora estoy aqui y en la infancia, Huelva...
"que tiene sus patios en el corazón
suficiente de sus casas, patios como pequeños claustros",
--decía J.R. Jimenez--
Ahora estoy en aquel patio,
en aquel peqeño claustro.
que tenía dos bancos de mosáicos
dónde mi padre se sentaba al llegar del trabajo
en las tardes de verano,
y una escalera para bajar a un corral
con gallinero y helechos, pilistras,
jazmín, dama de noche, claveles y geranios
que embrujaban aquel patio.
Y un día afuera de él me empujaron.
Fue el Viento que lleva la vela
de esa partícula viajera --¿libre?--
a través de los vacíos espacios...
y que, de vez en cuando,
deja caer un polen,
una simiente de contrabando,
pra ir dejando una huella
que identifique nuestros pasos.
Después, el Mundo,
el Mundo, ajeno y ancho,
puertos, bahías, ensenadas,
refugios dónde bajar el ancla
y permanecer un rato
para otra vez alzar el velamen
hacia otros portales y entradas
...en busca de los mismos patios.
Estoy aqui, y, simultaneamente,
en todos esos caminos
por dónde he ido andando y andaré
hasta llegar un día
a reencontrarme con aquel pequeño claustro
dónde mi padre se sentaba al llegar del trabajo
en las tardes de verano, y mi madre,
canturreando amores truncados,
regaba las platas en umbrías
dónde ahora cantan esos grillos
en la noche como si presagiaran
lo que estoy pensando...
http://sisifocansado.blogspot.com/2012/09/estar-en-dos-sitios-o-en-mas-sitios-al.html