de ésta bitácora de barco varado,
y alguíen --esos visitantes invisibles
que suben a bordo en éste mar irreal
y alienante de la 'Internet'-- la leyó;
y fue entónces cuándo la releí de nuevo,
y me dí cuenta de que en ésta
"Broken Chord" hay algo más
metafórico y revelante de lo que dice
el pensador aleman y que escapa
de lo que ví en ello en un principio.
Y es que a la guitarra que nos dan al entrar
para que toquemos en ella nuestra melodía particular,
obviamente, se le van rompiendo las cuerdas
sobre el pentagrama de nuestro navegar...
Y todo, todo depende si durante el viaje
hemos aprendido a tocar con menos cuerdas lo que tenemos que interpretar...porque si no salimos de aqui desafinando, y ésto no es la mejor forma de terminar.
Asi que, ante el Gran Fracaso de la Civilización
dónde vivimos, tenemos que aprender a tocar
con menos cuerdas,
con menos servicio instrumental,
incluso, sin cuerdas ya,
que ésto muchas veces,
en las vueltas que dá la vida,
suele pasar, y entrenémosnos en silvar o cantar,
en ser autosuficientes con nuestra música personal,
para llegar preparados al meandro final
y ya no tener que depender de una Broken Chord
que nos pueda hacer Naufragar...)
......................................................
El otro día se me partió
una cuerda de la guitarra
Pero seguí tocando,
no muy bien,
pero me dije:
No tengo ganas
de salir a comprar otra;
es igual.
Hoy se me ha roto otra cuerda.
Y ya lo que toco queda cojo,
desafinado.
Y si sigo así he calculado
que dentro de poco
me quedaré sin cuerdas,
y sin cuerda,
y entónces, no es que ya
no pueda tocar muy bien,
y ni siquiera cojo y desafinado,
es que no voy a poder tocar
nada de nada
porque me habré quedado sin cuerdas,
sin cuerda, y contra las cuerdas
Las cuerdas de la guitarra
son como necesarios peldaños
que necesitamos
para tocar y subir templados.
Lo que pasa es que,
con el paso de los años,
la tensión en las mismas,
en nuestras desgañitadas melodías,
las van desgastando como esos peldaños
de la escalera por dónde vamos subiendo
...o bajando, depende de qué composición
estemos tocando.
Esperemos que todo sea debido
a lo que dijo Feuerbach:
"Sin límite, tiempo, ni sufrimiento,
no hay tampoco ni calidad,
ni energía, ni espíritu,
ni llama, ni amor.
Sólo el ser menesteroso es el ser necesario.
Una existencia sin necesidad
es una existencia superflua
...Un ser sin sufrimiento
es un ser sin fundamento.
Sólo merece existir el que puede sufrir.
Sólo el ser doloroso es un ser divino" (1)
de cuerdas partidas,
arrugando a tantos guitarristas,
la misma alienante rutina,
pare decirle que ya me encuentro bien.
Que sólo ha sido una cosa pasajera
que a todos nos pasa de vez en cuándo.
"Un hombre tiene que haber caído muy bajo en la vida para creer que es feliz" Baudelaire
Hace unos días que ando preocupado:
me encuentro feliz.
¿Qué extraño?
Me pregunto
¿Qué le habrá sucedido a mi existencia?
Porque existencia viene del latín ex–sistere,
que significa "lo que está ahí",
ese 'ser-ahí',
el 'Dasein' heideggeriano,
el hombre cogido en las pinzas
de su inexorable destino humano.
Y busco consuelo en los sabios.
Pero al primero que llego me desconsuela aún más
¿Entónces?
¿Es que yo estos días estoy desafiando
y desobedeciendo esos planes divinos?
Y comienzo a sentir una cierta intranquilidad
"Sin sufrimiento,
no hay tampoco ni calidad,
ni llama, ni amor.
Sólo el ser menesteroso
es el ser necesario.
Una existencia sin necesidad
es una existencia superflua
Un ser sin sufrimiento
es un ser sin fundamento
Sólo merece existir el que puede sufrir
Sólo el ser doloroso es un ser divino"
"Un ser sin sufrimiento
es un ser sin fundamento
Sólo merece existir el que puede sufrir"
Me repito y repito ya asomado al balcón
del incipiente malestar y la desazón.
Y, con vértigo,
comienzo a elevarme
de ese escalón tan bajo en la vida
en el que había caído...
Uf...menos mal...
Ya estoy mejor y recobrando
ese fundamento,
ese merecer vivir,
que, sin darme cuenta,
había perdido éstos días...
Uf...que susto...
Pero ya me encuentro bien.
Ya deje de ser feliz
y he pasado al normal pathos
de la existencia humana.
ni energía, ni espíritu,
ni llama, ni amor.