Hace tiempo que en las páginas
de la llamada red --todos estamos enredados para servirle a Dios y a Usted--, vemos, a la derecha, dónde se colocan los anuncios comerciales,
al señor de la foto de arriba
buscando a su tío desaparecido
en una de las tantísimas fosas comunes
repartidas por el país.
Y hoy, curiosidad perpetua,
picamos en la imagen
y nos encontrarnos con ésto:
Jaime Romera, sospecha que su tío está en una fosa común. "Mi tío (Arsenio) todavía está enterrado en la cuneta de la carretera de Barcones, pero no sabemos dónde... le mataron por sus ideas. Mi ilusión es que un día podamos encontrar sus restos… y darle una sepultura en condiciones."
Arsenio era sindicalista. Le detuvieron el 21 de julio de 1936 y, varias semanas después, a su familia le contaron que le habían matado y enterrado en una fosa común.
Desde entonces, no han parado de buscarle. La ‘Asociación Recuerdo y Dignidad’ ha denunciado el caso de Arsenio, pero el Estado español no ha hecho nada para encontrar sus restos.
La ilusión de Jaime es encontrar los restos de su tío para darles una sepultura digna y que se sepa lo que pasó con el fin de que no vuelva a pasar nunca más.
Su caso no es único. Se estima que miles de personas fueron víctimas de desaparición forzada durante la guerra civil y el franquismo. Los restos de muchas de ellas están en fosas comunes de todo el territorio español. Sus familias mantienen viva la ilusión de conseguir justicia.
Miles de víctimas de la guerra civil y el franquismo, y sus familias, mantienen viva la ilusión de conseguir justicia.
Que la consigan no es cuestión de suerte.
Firma para enviar esta carta
a los partidos políticos en el Congreso
y pide que éste año por fin se haga justicia.
Llevamos 336.708 firmas
Amnistía Internacional 2019
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Hay vivos, muertos y desaparecidos,
tres status no muy bien percibidos.
El desaparecido es un ente
al que, sin sepultura conocida,
lo sacaron fraudulentamente,
criminalmente,
del mundo de los vivos
y se le da por desaparecido
para que su ejemplo no fructifique
y nadie siga su camino.
Y, ademas, lo más kafkiano
y barroconiano: muchas personas
tienen que firmar para reclamarle
su esqueleto a los sucesores
de los que lo asesinaron.
En España no se pide Justicia
--éstas peticiones estan
tratadas en el Código Penal--,
sólo el esqueleto,
porque la Justicia
también está desaparecida;
sólo se piden huesos,
esqueletos,
restos de muertos.
Se piden y no lo dan.
"¿Cómo cree usted
que le vamos a entregar
la evidencia empírica
de nuestro genocidio?;
¿cree usted que somos
estúpidos o qué...?"
Y hay que subirse en un avión
e irse a la Argentina pa reclamar
aúnque sea tan sólo el fémur,
la tibia o el peroné,
lo mismo da,
la cuestión es obtener
aúnque sea una parte
del desaparecido
para que vuelva a aparecer
Estos anuncios se hallan en España
--en Europa--,
en el siglo XXI,
en la llamada red,
a la derecha,
dónde se colocan
los anuncios comerciales
como en un marketing más
donde necesitamos
comprar o vender.
Y nada
No pasa nada
Absolutamente nada
Todo es nor-mal
Nadie comenta
Nadie los ve.
Y todo el mundo
esta contento y bien.
Y todos continuamos
con nuestras vidas
mondas lirondas
como si nos hubiésemos
quedado sin alma, sin ser.
Y mientras Plácido Domingo
es un escándalo
que hay que dar a conocer,
al mosquito lo siguen colando
y el camello que se traga
baja al estómago
para alimentarnos
con lo que nos dan a comer.
En el fondo hay que felicitarlos,
chapo!,
porque todo lo tienen montado
muy bien
para que pocos se den cuenta
de éste grandioso paripé
dónde éstos estafadores sin fronteras,
controlando las cartas sobre la mesa,
en los derechos y jorobados humanos
nos hagan creer.
Suerte, Jaime.
Si fueses camboyano
el Estado ya te hubiése ayudado.
(España es el segundo país del mundo,
despues de Camboya,
con mas desaparecidos)