que podemos ver mas abajo)
Hoy es el día en el que hemos podido comprobar aquella "nueva táctica de la Iglesia, ésta vez a largo plazo..." : hoy es el día de la patrona de Huelva, la Virgen de la Cinta.
Hemos cogido el coche y hemos ido a su ermita.
Abajo, las marismas del delta del Odiel se hacían puertas infinitas.
Habia misa.
Y en el sermón --que lo oí un instante desde la puerta-- el cura hablaba de salvación, de Dios, de María... Y pensé: ¿cómo es posible que sigan con la misma letanía? La misma que en el 36 creó ríos de sangre e infamias desconocidas.
Mis padres --yo aún no había nacido-- a final de ese mismo año, y para tratar de escapar del terror que inflijía esa misma salvación, Dios y Maria --me contaron-- fueron a alquilar una vivienda por aquellos parajes lejanos --por aquel entónces-- dónde estaba la ermita. Pero lo que me contaron después fue peor porque más tarde se enteraron de que los escuadrones de la muerte de Falange habían recorrido aquellas áreas limpiándolas de indeseables. Tal vez si se hubiésen trasladado a vivirá alli ahora mismo yo no estaría escribiendo aquí...Nada deseable.
En mi casa --hoy comida por un bloque de pisos y otros bloques más-- había una gran Virgen de la Cinta adosada a la pared, compuesta de mosaicos y con dos farolitos que mi padre encendía los domigos y fiestas de guardar. Era como un alto altar que en las noches de farolitos encendidos se asemejaba a un lúmen shamánico de barruntos y presagios que daba cierta aprehensión mirar; sentía que aquella imagen me espiaba en todos mis escondidos pecados que no quería confesar. Me crie y crecí bajo su mirada (No elegimos en ésta vida nada; todo depende bajo que cinta se nace y a qué portal nos lleva la vida que nos hilvana)
Recuerdo que 1957 hicimos unos ejercicios espirituales --que duraron varios días-- en el mismo santuario de la Virgen de la Cinta. Fue un mundo difícil ahora de explicar dónde la Inquisición sonreía para no hacerse notar, y la notolerancia se disfrazaba de tolerancia para pescar con su anzuelo represor a aquellos pececillos inocentes e incautos que en su juventud sólo buscaban encajar, ser reconocidos por el cosmos dónde se existía sin que aún el cortex cerebral hubiéra comenzado autónomamente a pensar, a reflexionar. Todo en aquellos ejercicios eran obediencia y charlas que inculcaban el buen camino, el arrepentimiento, el perdón y la fé, en un país dónde aquella misma Iglesia vaticanal que predicaba tenía hecho un pacto con el terrorismo masivo que mordía a un pueblo amordazado y acogotado que no sabía ni podía responder. Cuándo llegué a casa, curado por aquellos ejercicios espirituales, mi madre me dijo que traía 'cara de santito'. La santidad se pierde o se gana según qué clase de ejercicios nos de por practicar.
Pero no perdamos el hilo.
España es un país de vírgenes, especialmente Andalucía. Y hoy es el día de la patrona de Huelva. El entero país es como un gran sacro barco lleno de patronas y patrones, y las tripulaciones, sus marianos cofrades. La fé salva balsones y hunde las mejores mentes y corazones.
Hay Virgenes por todos lados, La Virgen del Carmen, Auxiliadora, Dolorosa, Victoria, Macarena, Esperanza, Rosario, Montemayor, Agueda, Pilar, Milagros, Rocío, etc, todas, Madre de Dios. No es cierto que madre solo hay una. En ésto Dios fue muy afortunado.
Sobre ésta última, la Virgen del Rocio, Fernando Ruiz Vergara hizo un histórico, sociológico y didáctico documental, y, como tal, fue censurado por la 'Constitución' democrática de 1978. El documental, estructuralmente, se podría aplicar a cualquier Virgen del santoral (por eso lo traemos a esta bitácora), y del cúal hemos entresacado éstos minutos con los que hemos comenzado éste escrito:
No estaría demás, por su importancia, y en éste día de la Virgen de la Cinta, cuándo la "nueva táctica de la Iglesia, ésta vez a largo plazo", ha hecho a todo éste cotarro funcionar, hacer otra finta, otro regate, y traer a la luz el extraordinario trabajo de Fernando Ruiz Vergara.
5. "ROCÍO", FEBRERO DE 1981
Apenas resuelto el caso de El crimen de Cuenca, surgió la polémica con Rocío, documental prohibido a pesar de conseguir el primer premio del certamen del Festival de cine andaluz de Sevilla.
En él, su director Fernando Ruiz se había propuesto “reflejar lo más fielmente el contexto histórico, antropológico y social de la fiesta rociera”. En ambos casos se aplicaba el Código Penal franquista que seguía controlando lo publicable por parte de los llamados “poderes fácticos” como lo destacó Román Gubern en El Periódico de Barcelona el 18 de abril de 1981: “vuelve a surgir otro revés, esta vez por un presunto escarnio a la religión católica”.
Al igual que el filme anterior, despertó los recelos de la extrema (y no tan extrema) derecha local ya durante el propio rodaje, llegando incluso a recibir advertencias del alcalde de Almonte, José María Reales Cala, curiosamente uno de los hijos de Reales Carrasco que se querellaría contra el director, la guionista y uno de los entrevistados.
La querella que, en efecto, se interpuso fue por escarnio de la religión católica, ultraje público y calumnias contra José María Reales Carrasco, su memoria y sus herederos como guardianes de la misma. Reales, alcalde del municipio durante la dictadura de Primo de Rivera, era presidente de la Hermandad Matriz de Almonte e importante terrateniente durante los años de la Segunda República.
La película narra, en clave antropológica, el origen y evolución de la romería del Rocío, y su utilización por parte de la Iglesia y los caciques locales para representar el orden social mediante el ritual, explicando las relaciones entre fiesta, transgresión y este mismo orden social.
En las entrevistas, algunos vecinos del pueblo recuerdan los hechos sucedidos en 1932, cuando Reales Carrasco y otros terratenientes promovieron una revuelta contra el alcalde republicano, y durante la Guerra Civil, durante la cual se ejecutaron a 100 personas (de las que sólo un tercio constan en el registro civil).
Uno de ellos, Pedro Gómez Clavijo, explica cómo José María Reales Carrasco asesinó “a palos” a trabajadores de Almonte: fue el motivo de la denuncia de los herederos que provocó el secuestro.
La prensa de los años ochenta evitó abordar estos hechos, conocidos en la zona, que están en el trasfondo del documental y que permiten entender su potencial desestabilizador para las bases de una Transición que dudaba de su solidez.
Al entrevistar a dos testigos clave que señalaban a José María Reales Carrasco como uno de los causantes de los tumultos de 1932 y de la represión a partir de 1936 se incumplía la ley de amnistía y los jueces procedentes del anterior régimen se encargaban de remediarlo48.
En 1981, la prensa progresista destacó las contradicciones del sistema. El País y El Socialista presentaron positivamente el documental, algunos periódicos más o menos izquierdistas intentaron un análisis artístico comparándolo con Tierra sin pan de Buñuel, también prohibido en 1933 y mal recibido por la población de Las Hurdes.
Jesús Fernández Santos desde las páginas de El País, el 6 de febrero, donde a pesar de reconocer ciertos defectos lo elogiaba, insistía en el paralelismo: “Desde Tierra sin pan pocas veces el cine español se ha acercado tanto al pueblo”.
Para El Socialista del 11 de febrero, la película era “apasionante” en clave social al mostrar las “bases de la dura lucha de clases que está en el basamento de la adoración mariana” y en plan formal “ya que utiliza todos los elementos del reportaje, estéticos e informativos”.
Para El País del 10 de abril, el filme trataba sobre el latifundismo y la religiosidad en Andalucía y aunque había sido secuestrado por la denuncia de un particular, había temas más graves en una región donde a finales de los setenta volvían a arder cosechas como en los años treinta50. A
Al igual que le sucedió a Alfonso Grosso en Con flores a María, Ruiz Vergara se encontró de frente con la dificultad de presentar una visión crítica del Rocío y exponer la falta de religiosidad de muchos de sus participantes.
(...)
Y ya está bien.
Creemos que ya hemos estimulado lo bastante a los interesados en el tema para que si quieren puedan continuar leyéndolo en:
http://dx.doi.org/10.5209/rev_ARAB.2015.v15.n3.48619