Dibujo de un OVNI sobre el Silo de Misiles de Carpio Grano, North Dakota, 24-8-1966 |
Este Epílogo lo tenemos que empezar
con el título de un famoso libro de Michel Foucault:
"MAD-ness and Civilization"
'A History of Insanity
in the Age of Reason'
Es la história del ser humano:
Locura y Civilización,
Locura y Razón,
es lo que mas atrae a nuestros Visitantes
del Espacio Sideral.
Es ésta Mortal Contradicción,
Locura y Razón,
única en el armonioso Cosmos,
en el balance Universal,
la que compone los dos filogenéticos Vectores
del Paraleogramo de Fuerzas de la humanidad
al que nunca le hemos podido encontrar
una Resultante, un Equilibrio...
desde que Comimos el Fruto del Arbol
de la Ciencia del Bien y del Mal.
No sabemos muy bien si la dinámica de ésta evolución,
desde el hacha de piedra hasta el "maletín nuclear",
es "impuesta" desde los mas enfermos en el Poder,
es el resultado de la "voluntad" subconsciente general,
o es el destino de un sofisticado "programa genético"
que nuestros esotéricos Visitantes
vienen siguiendo paso paso desde tiempo inmemorial.
Pero sea lo que fuese,
lo que nítidamente se advierte es que es la Locura
la que viene triunfando mediante su llamado "progreso"
--que se nutre, paradójicamente,
de la misma Razón que nos hace naufragar--
al que nunca se puede cuestionar
...a pesar de que al resolver un problema
se crean, en reacción en cadena, mil más.
Y esto es lo que vienen observando nuestros Visitantes
desde tiempo inmemorial.
No. No sabemos qué son,
quíenes son,
cómo piensan,
cómo funcionan,
qué clase de vida los posee,
de qué clase de mundo vienen,
de qué clase de dimesión provienen,
y qué clase de curiosidad e intención los trae aquí.
Pero lo que si sabemos es que vigilan
esta Locura y Civilización,
esta Locura y Razón,
como un antropologo analiza y estudia
tribus primitivas: sin interferir.
Pero lo que si sabemos es que representan
un medio ideal para conocernos,
para tratar de saber,
según cómo responde el hombre a ellos,
qué clase de criatura
es éste extraño ser humano,
que, viviendo en un Paraíso de Tierra y Mar
--el Planeta Tierra es un Eden de plena vida,
paísajes, habitats, floras y faunas--,
haya llegado con su llamado "progreso"
a ésta Absurda Locura Destructiva
de los arsenales de misiles nucleares,
que, conectados al "maletín nuclear"
del presidente de turno,
apuntan a la aniquilación de la Humanidad
--tal como la conocemos hoy en día--
y a sembrar el terror y la desolación
en las demás criaturas que comparten con nosotros
éste Paraíso de Tierra y Mar.
Esto mismo es, en esencia,
y en su propio lenguaje,
en su propia mente,
con su inmanente apreciación,
con cual que sea su intrínseco funcionamiento vivencial,
lo que ellos deben de estudiar y analizar,
y sentir,
y calibrar...
De seguro que no hay muchos Planetas
como nuestra Tierra en el Universo:
con la justa órbita alredededor de nuestra Estrella Solar,
con la adecuada distancia de nuestra Luna,
con un campo magnético cómo escudo salvador,
con la suficiente atmósfera,
con la apropiada masa y fuerza de gravedad,
con la conveniente oblicuidad, excentricidad y precesión,
y, como dice Martin Rees:
con esos "Justos Seís Números" matemáticos
que "constituyen la receta para todo Universo".
Y aquí estamos,
después de tres mil quinientos millones de años
desde que apareció el Milagro de la Vida,
desde la ameba hasta el presente evolutivo
de todas las criaturas de hoy en día.
Y entre esas criaturas surge un antropoide,
erguído, bípedo y vestido,
porque, inexplicablemnte, contra las leyes
darwinianas de la evolución natural,
perdió su manto de pelo protector;
un mono-vestido creador --por necesidad--
de su propia comunicación con su habla,
y con un extraordinario y "sui generis" cortex cerebral
dónde, contradictoriamente, se combinan
Locura y Civilización,
Locura y Razón,
que han creado un "progreso"
desde el "Homo habilis" hasta éste "Homo sapiens"
constructor de un armamento nuclear de guerra
que insanamente ha titulado:
"Destrucción Mutua Asegurada"
"Mutual Assured Destruction", MAD
Por ello, al llegar a éste Paraíso de Tierra y Mar,
esas criaturas...
que no sabemos qué son,
quíenes son,
al ver en los silos nucleares la MAD,
deben gritar:
"¡Santos Cielos!..
...¿Pero que están hacíendo éstos de-mentes?
...¡They are MAD!...
¡Cortémosles los circuitos electrónicos
a ver si entienden la advertencia
y paran ésta locura fantasmal!"
Después,
nos observan tristemente y se van.
No quieren interferir,
solo sugerir.
Dándonos tan sólo un aviso.
Nos visitan desde hace mucho tiempo ya
pero nunca vieron MAD,
nunca nos observaron en esta situación tan demencial,
el rumbo perdido,
la cabeza, como dijo Cristo,
sin poderla parar, descansar,
empeñados en el aquelarre de un "progreso"
al borde de un abismo que ellos
trantan de desmantelar
desarticulando la electrónica de esos silos
dónde la "Mutual Assured Destruction"
"asegura la mutua destrucción" de la humanidad.
El epílogo no podía empezar
y terminar de otra manera,
sino con MAD,
in the Age of Reason'
Es esa misma Locura que observan,
y quieren desarticular,
esos seres que no sabemos qué son,
quíenes son,
cómo piensan,
cómo funcionan,
qué clase de vida los posee,
de qué clase de mundo vienen,
de qué clase de dimesión provienen,
y qué clase de curiosidad e intención los trae aquí...
pero que nos hacen ver
qué clase de extrañísima criatura
es el ser humano,
que la única fórmula que halla de convivencia
es amenazando con el aniquilamiento
de todo y de todos en una Destrucción Mutua Asegurada
con la que creen que pueden obtener la "paz".