¡Yes, We Can!
No dejar que entre nadie
que todos llegan a robar,
con sus sonrisas y crucifijos
o armas de militar.
No dejar que entre nadie
para poder vivir en paz,
que una manzana podrida
contamina a las demás
No dejar que entre nadie
en éste sagrado lugar
donde vivíis con la Naturaleza
en armonía ancestral
No dejar que entre nadie
donde no hay 'pecado original',
ese virus del "progreso"
de la privada propiedad
No dejar que entre nadie,
compañeros,
en vuestro paraíso natural,
porque así seréis el símbolo
de lo que no han podido esclavizar.
¡Yes, We Can!
"Soy un extraño al orden de las cosas existentes:
no tengo nada que ver con todo ello".
(Bazarov, personaje central de la novella de Turgeniev "Padres e Hijos")
Hoy me he enterado de una excelente noticia
que me ha llenado de júbilo dónde,
al fín, al fín, hemos podido comprobar que,
¡Yes, We Can!
Es decir:
Que ésta mancha de petróleo
que se extiende por todos lados es detenible,
por lo menos a escala microscópica,
para sacar de ella, el símbolo,
la denuncia en forma
de la demiurgica metáfora social
que necesitamos
Los sentinelenses se cargan con sus arcos y flechas a cualquier extranjero que se acerque
a sus costas, sea quíen sea,
vengan con el disfraz que vengan de:
curiosos,
turistas,
exploradores,
misioneros,
comerciantes,
documentalistas,
artistas,
talabarteros,
salvadoristas...
...todas son las avanzadillas
de los invasores colonialistas:
los mismos camuflajes y pantomimas;
todos traen el virus, aún si saberlo,
de una sociedad desmoronada,
corrrompida.
Estamos hablando de una tribu,
aislada del mundo por 60.000 años (¡)
que, por suma fortuna para ellos,
sigue intacta, pura,
sin la contaminación de la alienación
que la civilización ejecuta.
Y todo ello debido a la profunda visión
que tienen del mundo de afuera
que hace que no dejen que nadie de ese mundo
entre en sus fronteras.
Y para que ésto pueda haber sido alcanzado
hace falta una Gran Sabiduría.
Los habitantes de la isla Sentinel del Norte
del Oceano Indico, tienen esa sabiduría:
La de haber visto claro
que si dejan entrar en su cesto
a la manzana podrida
toda la comunidad se podriría
Y es importante, muy importante,
porque ésto no es una revolución socialista
en la que, a pesar de la justicia social,
se sigue incorporados
al pastel consumista de cosas y cacharros
de la red oficial;
no: ésto es es una revolución total
para no dejar entrar ningun resquicio
de la civilización en general
donde se afirma y reafirma:
No queremos nada, nada,
de vuestra "vistosa fachada"
Y és ésta revolución par excellence
lo que celebramos