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El soberanismo del pueblo catalan,
con sus prisioneros políticos, exilados y apaleados,
sigue, vivo y fuerte, con sus velas alzadas
dónde continua soplando, contundentemente,
el viento de la dignidad y la razón.
el viento de la dignidad y la razón.
Nos hubiése gustado oir de Puigdemont
que del país al que no quieren pertenecer
es una francocracia porque --entre otras cosas--,
su rey y Jefe de Estado franquista
no ha sido elegido por los ciudadanos
...y nosotros queremos --entre otras cosas--
un Jefe de Estado para el pueblo catalan
elegido democráticamente por los catalanes
y no por un nefasto genocida que perteneció
al antiguo y diabólico Eje Berlin-Roma-Madrid...
Nos hubiése gustado oírlo.
(Se oyen tan pocas y crujientes verdades!)
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PD.
¿Por qué en el régimen de la "free expression"
ningún periodista español se ha atrevido
a hacer la misma entrevista en algún medio
de comunicación de España?
¿No tienen los súbditos del reino bobónico
el derecho a conocer lo que piensa
y argumenta Puigdemont...porque
a fin de cuentas sigue siendo el depuesto
presidente de la Generalitat
por un golpe de estado?
Y han sido los rusos -RT-
(¡que vienen los rusos!)
por los que nos hemos tenido
que enterar de su
Principium rationis sufficientis.