Hay el "sueño de la razón",
o la 'razón del sueño',
el goyesco, el oficial, el intocable, el impuesto,
y el rodinesco,
"sum ergo cogito",
el que se impide a toda costa,
y a toda playa,
para que no moleste
la grotesca irracionalidad
de los monstruos que produce el primero.
Y lo raro,
desde la perspectiva
de nuestros visitantes del Cosmos
que vienen a estudiarnos y vernos
--porque desde nuestra hermenéutica humana
"siempre es natural lo que hacemos",
por la darwiniana selección natural del mejor
que es en el gran dogma en el que creemos--,
es extrañisimo lo que en ésta Tierra
esta ocurriendo:
que una criatura 'inteligente'
produzca monstruos
cuando su razón se embarca en los sueños.
Y lo más innaudito y esquizofrénico
es que la mayor parte
de las energías, fuerzas, trabajo y dineros,
vayan destinados, precisamente,
a erradicar todo lo que se oponga
a ese sueño de la razón goyesco.
Y ésto, ésto es lo que no entienden
nuestros visitantes de otros cielos.
Y por eso llegan una y otra vez
a comprobar y cerciorarse
de que no le engañan sus sentidos
en lo que estan viendo...
A mi me pasa lo mismo que a ellos.